Telef¨®nica condiciona su participaci¨®n en el proyecto de fusi¨®n entre ITT y CGE
La participaci¨®n de la Compa?¨ªa Telef¨®nica Nacional de Espa?a (CTNE) en el hohding europeo de telecomunicaciones Eurotel no es todav¨ªa segura, pese a que la empresa espa?ola se ha comprometido, mediante un acuerdo de intenciones, a tomar una participaci¨®n del 7% de Eurotel, con una inversi¨®n de 40.000 millones de pesetas. Tanto Econom¨ªa como Telef¨®nica han modificado sus posturas iniciales, pasando de un neto apoyo al proyecto, surgido a consecuencia de la fusi¨®n entre la empresa francesa nacionalizada Compagnie G¨¦n¨¦rale d'Electricit¨¦ (CGE) y la ITT estadounidense, a una situaci¨®n de "escepticismo".
Actualmente, los expertos de Telef¨®nica est¨¢n elaborando el estudio de viabilidad de su participaci¨®n en este proyecto, que podr¨¢ estar concluido a finales de este mes de septiembre. Una vez estudiado este plan, el Gobierno autorizar¨¢ o denegar¨¢ la participaci¨®n de Telef¨®nica en el proyecto.Las reticencias de Econom¨ªa siguen centradas en la complejidad que encierra la fuerte inversi¨®n financiera exigida en la operaci¨®n -concretamente 300 millones de d¨®lares en capital-, aunque fuentes de Telef¨®nica aseguran que "despu¨¦s de haber mantenido varias reuniones con los bancos que operan con la empresa ya existe un predise?o de la ingenier¨ªa financiera a que obliga esta operaci¨®n, aunque todav¨ªa no se puede desvelar su alcance".
La modificaci¨®n de la postura inicial de Telef¨®nica -"ahora estamos a la espera de que nos convezcan", aseguran fuentes de la empresa- se debe a los cambios que ha experimentado el proyecto desde sus planteamientos primeros. Aunque no se esgrima como factor determinante, el cambio que se ha producido este verano en los porcentajes de participaci¨®n mayoritarios en Eurotel podr¨ªa ser aprovechado por Telef¨®nica para justificar su descuelgue definitivo del proyecto, "por modificaci¨®n de los acuerdos". Con el mencionado cambio, la CGE se ha comprometido a tomar una participaci¨®n en el holding europeo de telecomunicaciones del 60%, en lugar del 70% anterior (Telef¨®nica deber¨ªa suscribir un 10% de ese total)-, e ITT se quedar¨ªa con el 40% con un derecho por parte de la sociedad francesa para comprar el 10% restante.
Aunque oficialmente Telef¨®nica ha ratificado a lo largo de las reuniones mantenidas con los franceses este verano su inter¨¦s en el proyecto, los negociadores espa?oles han lanzado el mensaje de que la participaci¨®n se condicionar¨¢ al cumplimiento de tres puntos b¨¢sicos. El primero de ellos es que Telef¨®nica s¨®lo participar¨¢ en Eurotel si se trata de un proyecto europeo y no s¨®lo franc¨¦s. La participaci¨®n en el proyecto de la Soci¨¦t¨¦ G¨¦n¨¦ral de Belgique (SGB) -se ha comprometido a tomar un 10% de la participaci¨®n que corresponde a CGE-, auspiciada por el antiguo comisiario europeo Etienne D'Avignon, no supondr¨ªa, seg¨²n los negociadores espa?oles, que el proyecto perdiera su car¨¢cter franc¨¦s.
El segundo requisito, que junto con el anterior tienen car¨¢cter de Estado, es que la participaci¨®n de Telef¨®nica deber¨ªa suponer la venta a Eurotel del 21% de las acciones que tiene de la filial de ITT Standard El¨¦ctrica, as¨ª como de su participaci¨®n en Marconi. En el pr¨®ximo mes de octubre est¨¢ previsto que se inicien las negociaciones para intentar alcanzar un segundo plan de reconversi¨®n para ambas empresas espa?olas, uno de cuyos aspectos m¨¢s espinoso es el de la reducci¨®n de plantillas, que podr¨ªa afectar, seg¨²n los expertos del sector, a unos 5.000 trabajadores. Junto a estos dos requisitos, los negociadores espa?oles han planteado la necesidad de que Telef¨®nica tenga en la nueva sociedad europea un peso espec¨ªfico mayor al que le corresponder¨ªa por su mera participaci¨®n accionarial. Telef¨®nica justifica su petici¨®n en el hecho de que de los socios que se han comprometido, solamente la empresa espa?ola es operadora, mientras que Alcatel, del grupo CGE, es productota, y la SGB belga es exclusivamente financiera. La nueva postura de Telef¨®nica ha originado un cambio en la estrategia de los negociadores franceses. Concretamente, el pr¨®ximo d¨ªa 11 viajar¨¢ a Espa?a el ministro delegado de Telecomunicaciones franc¨¦s, Gerard Longuet, para tratar este asunto, y tambi¨¦n a lo largo del mes de septiembre se espera la visita de Pierre Suard, presidente de CGE-Alcatel.
Precisamente, la decisi¨®n del Gobierno franc¨¦s de destituir al anterior presidente de CGE-Alcatel, George Pebereau (quien firm¨® el acuerdo de fusi¨®n de la empresa gala con el presidente de ITT, Rand Araskog), as¨ª como la decisi¨®n de reprivatizar el consorcio de telecomunicaciones franc¨¦s, ha sido considerada por los negociadores espa?oles como un cambio sustancial de los planteamientos de este proyecto. Por otra parte, todav¨ªa quedan por negociar algunos aspectos globales de la operaci¨®n, como es el de la financi¨®n de los costes de reestructuraci¨®n de Eurotel, que alcanzar¨ªan los 600 millones de d¨®lares, seg¨²n el plan de viabilidad que se ha elaborado este verano. A esta cantidad habr¨ªa que a?adir otros 250 mill¨®nes de d¨®lares, que se engloban en una partida de "complementos".
Ampliaci¨®n de capital
La soluci¨®n que parece m¨¢s avanzada, y que previsiblemente ser¨¢ explicada a Telef¨®nica en las visitas que recibir¨¢ este mes, es la de aprobar una ampliaci¨®n de capital de 700 millones de d¨®lares para todo el grupo, de los que Telef¨®nica deber¨ªa suscribir unos 50 millones de d¨®lares, unos 6.700 millones de pesetas. De llevarse a cabo esta ampliaci¨®n, previsiblemente en 1987, y si finalmente Telef¨®nica participa en el proyecto, la empresa espa?ola deber¨ªa afrontar un desembolso global de cerca de 47.000 millones de pesetas.
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