Nada se sabe de la herencia

Ning¨²n elemento realmente nuevo se conoce oficialmente a prop¨®sito de la herencia de Jacqueline Picasso y del destino o destinos diversos de la misma; y no es f¨¢cil, se le asegur¨® ayer a este diario, que se filtren noticias m¨¢s o menos parciales antes del anuncio oficial.Las autoridades espa?olas y francesas se mantienen a la espera de lo que puedan revelar un testamento o documentos desconocidos sobre el particular. Todo indica que Catherine Hutin ser¨¢ la heredera de las colecciones de su madre; en todo caso, es su hija ¨²nica, con todo el peso jur¨ªdico que ello representa.

De confirmarse este destino del legado picassiano de Jacqueline, tendr¨ªa que pagar cantidades de dinero realmente fabulosas al fisco franc¨¦s como derechos de sucesi¨®n; y lo rn¨¢s probable es que por ese concepto hiciese una donaci¨®n de obras quel tambi¨¦n ser¨ªa importante; as¨ª es como se ha hecho posible el Museo Picasso de Par¨ªs, nutrido esencialmente por la donaci¨®n que hicieron todos loslierederos de Picasso en su d¨ªa.

Entre las obras que conforman este museo se encontraban algunas de Corot, C¨¦zanne, Le Nain, Braque y Modigliani, de la colecci¨®n de Picasso.

La colecci¨®n

A la muerte de Pablo Picasso, acaecida en Notre-Dame-de-Vie en 1973, sigui¨® una larga batalla legal entre los herederos.La colecci¨®n de obras de Picasso que hered¨® Jacqueline, y que conservaba en su mansi¨®n de Notre-Dame-de-Vie, es de un valor dif¨ªcil de calcular. Se trata de 1.876 cuadros, 7.089 dibujos, casi 5.000 dibujos en cuadernos, 19.095 grabados, 1.355 esculturas y 2.880 piezas cer¨¢micas del prol¨ªfico pintor malague?o, entre otras importantes obras, todas ellas valoradas en unos 22.000 millones de pesetas.