"Mi matrimonio fue un infierno", asegura la ex mujer del brigada acusado de violaci¨®n

Rafael Fernando Peregr¨ªn Alcal¨¢, de 35 a?os, brigada del? Ej¨¦rcito y presunto autor de la violaci¨®n y agresi¨®n que sufri¨® una joven de 20 a?os, pas¨® ayer a disposici¨®n judicial. Rosa, la ex esposa del brigada, madre de cuatro ni?os de edades comprendidas entre los 16 y los cuatro a?os, calific¨® ayer los 14 a?os de convivencia con su marido como "un aut¨¦ntico infierno en el que no faltaron los malos tratos y las violaciones". En relaci¨®n con las acusaciones que pesan sobre su ex esposo, Rosa asegur¨® que "es capaz de eso y de m¨¢s".

Hace una semana, cuando Rosa se entrevist¨® por ¨²ltima vez con su marido, ¨¦ste volvi¨® a amenazarla con dejarlos a todos en la calle si ella no volv¨ªa a vivir con ¨¦l. "No aceptaba la separaci¨®n. Es un hombre totalmente machista y violento. Cuando ven¨ªa por casa, nos insultaba sin miramientos lo mismo a m¨ª que a los ni?os", dice.Rosa, de 32 a?os de edad, conoci¨® a Peregr¨ªn en Melilla, de donde ella es natural, cuando aqu¨¦l realizaba el servicio militar. Se cas¨® con ¨¦l a los 16 a?os, pocos meses despu¨¦s de quedarse embarazada. El matrimonio nunca funcion¨® del todo bien, pero tuvieron tres hijos m¨¢s. Pronto vino el traslado a Madrid. "La situaci¨®n empez¨® a hacerse insoportable para todos, lo mismo para m¨ª que para los ni?os, que sufr¨ªan los insultos de su padre y presenciaban escenas violentas constantemente. Sab¨ªa que manten¨ªa relaciones con otras mujeres y que ¨²ltimamente viv¨ªa con una llamada Berta. La verdad, no lo entiendo...", dice.

Denuncias por malos tratos

Los malos tratos y las palizas estaban a la orden del d¨ªa en la casa y Rosa lleg¨® a presentar alguna que otra denuncia contra su marido: "Nunca me hicieron demasiado caso. En una ocasi¨®n lo condenaron a tres d¨ªas de arresto, pero nada m¨¢s". Rosa describe al hombre con el que convivi¨® durante 14 a?os como una persona con cambios muy bruscos y constantes de car¨¢eter.

"Se medicaba a diario. Tomaba tres pastillas, una de ellas muy fuerte, que le recetaban en el cuartel y que frecuentemente combinaba con alcohol, lo que le pon¨ªa a¨²n m¨¢s irritable. Al principio, intent¨¦ ayudarle y le aconsej¨¦ que se sometiera a tratamiento m¨¦dico, pero no hacia caso", a?ade.

Rosa, que tiene la tutela de sus cuatro hijos, asegur¨® que percibe una pensi¨®n de 60.000 pesetas que le pasa el Ministerio del Ej¨¦rcito desde que se hizo efectivo el divorcio, en noviembre del a?o pasado. "Me preocupaba mucho saber qu¨¦ va a pasar con nosotros, porque carecemos de otros medios de subsistencia", afirma Rosa. "Yo soy una mujer sin estudios y ya paso grandes dificultades para sacar a los ni?os adelante", agrega.

En relaci¨®n con la acusaci¨®n que pesa sobre el brigada, Rosa asegura que pod¨ªa llegar hasta ese punto: "Es capaz de eso y de m¨¢s. Lamento profundamente lo que le ha ocarrido a Mar¨ªa de los Angeles, la joven que est¨¢ internada en el hospital Ram¨®n y Cajal".

Tanto la ex esposa del brigada como la joven herida est¨¢n pasando momentos de p¨¢nico estos d¨ªas ante la posibilidad de que Rafael Fernando Peregr¨ªn quede en libertad en fechas pr¨®ximas. Mar¨ªa de los ?ngeles fue amenazada de muerte por su agresor si denunciaba los hechos.

El brigada es natural de Tetu¨¢n y actualmente prestaba servicio en el departamento de inform¨¢tica del Ministerio del Ej¨¦rcito, en la plaza de Cibeles. ?ltimamente viv¨ªa en el n¨²mero 10 de la calle de Sierra de Alcubierre, en la localidad madrile?a de Alcorc¨®n, donde fue detenido.

Los vecinos de esta poblaci¨®n, que le conoc¨ªan como "el militar", lo definen como un hombre "chuleta, que presum¨ªa de estar en el Ej¨¦rcito y de tener un cargo importante".