Los jueces del 'caso Catalana'

F. SALES, Tienen una media de edad de 48 a?os y llevan 19 dedicados a administrar justicia. ?ste es uno de los rasgos m¨¢s significativos del retrato robot del equipo de magistrados que compone el Pleno de la Audiencia Territorial de Barcelona, que el pr¨®ximo viernes d¨ªa 21 tiene previsto reunirse para pronunciarse sobre la petici¨®n de procesamiento solicitada por los fiscales Jos¨¦ Mar¨ªa Mena y Carlos Jim¨¦nez Villarejo contra Jordi Pujol y otros 16 ex consejeros y directivos de Banca Catalana.

El pleno de la Audiencia Territorial de Barcelona, que act¨²a en este caso en sustituci¨®n del todav¨ªa no creado Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a, lo forman un total de 50 magistrados, que proceden de tres salas de lo civil, seis de lo penal y tres de lo contencioso administrativo, a quienes hay que sumar los m¨¢ximos responsables. de la instituci¨®n judicial: el presidente de la Audiencia Territorial, Jaume Amig¨® de Bonet, y el de la provincial, Antonio Do?ate.

Seis vacantes

A pesar de que la Audiencia de Barcelona est¨¢ compuesta por medio centenar de personas, al c¨®nclave del pr¨®ximo d¨ªa 21 de noviembre no asistir¨¢n m¨¢s de 43 magistrados, pues existen seis vacantes no cubiertas, a las que hay que sumar la ausencia obligada del instructor adjunto, Enric Anglada Fors, que, con sus 33 a?os de edad, es uno de los magistrados m¨¢s j¨®venes de la Audiencia Territorial. Anglada no asistir¨¢, en cumplimiento del principio jur¨ªdico de la "imparcialidad del juzgador", establecido en la ley de Enjuiciamiento Criminal, por el que no se permite que el juez instructor sea al mismo tiempo juzgador. A estas ausencias habr¨¢ que a?adir la de quienes no puedan asistir por cualquier raz¨®n -que deben ser de "fuerza mayor"-, que habr¨¢n de justificar expl¨ªcitamente ante la presidencia.

El primer punto pol¨¦mico de la sesi¨®n podr¨ªa suscitarse en torno a la configuraci¨®n del propio pleno, respecto a la presencia o no de tres magistrados recientemente incorporados a la Audiencia. Su nombramiento se public¨® en el Bolet¨ªn Oficial del Estado del pasado 1 de noviembre y, seg¨²n dispone el art¨ªculo 319 de la ley Org¨¢nica del Poder Judicial, tienen un plazo m¨¢ximo de 20 d¨ªas para incorporarse. Ese plazo finaliza el mismo 21 de noviembre. En medios pr¨®ximos a la presidencia de la Audiencia Territorial se asegura que a los tres magistrados se les podr¨ªa dispensar su asistencia al pleno, si previamente reclaman una dispensa especial.

Entre los magistrados entrantes se encuentra Rafael Gime?o Bay¨®n Cobos, titular hasta hace poco de un juzgado de Matar¨® y que pertenece al colectivo Jueces para la Democracia. Tiene una acreditada trayectoria progresista, puesta de manifiesto en numerosas ocasiones a ra¨ªz de sus comprometidas investigaciones. Entre ellas, destacan las efectuadas sobre grupos de extrema derecha y sus supuestas conexiones con fuerzas de orden p¨²blico, en las que lleg¨® a ordenar que se interviniera el tel¨¦fono de un cuartel de la Guardia. Civil. Gimeno tambi¨¦n investig¨® -la contrataci¨®n ?legal de obreros africanos y proces¨®. por ello a diversos industriales de la comarca. El magistrado Gimeno empez¨® a estudiar la causa de Banca Catalana la semana pasada, cuando a¨²n no se hab¨ªa incorporado oficialmente a su nuevo destino.

Antes del d¨ªa 21 de noviembre, se incorporar¨¢ tambi¨¦n a la Audiencia de Barcelona otro magistrado, Jos¨¦ Mar¨ªa Rives Seva, de 33 a?os, natural de Callosa de Segura, procedente de un juzgado de Denia (Alicante). El tercer reci¨¦n llegado es una mujer, Mar¨ªa Dolores Mondelo, que pas¨® desde un juzgado de distrito a la Sala Primera de lo Contencioso Administrativo de Barcelona.

Una media de 48 a?os

El pleno est¨¢ formado esencialmente por magistrados que, por la media de 48 a?os, puede considerarse joven. Dieciseis de ellos tienen menos de 40 a?os, siete est¨¢n entre los 40 y 50, y veinte superan los 50 a?os, nueve de los cuales son sexagenarios.

El magistrado m¨¢s joven es Miguel Ba?uls RIbas, de 27 a?os, que naci¨® en Liria (Valencia). El de mayor edad, Eloy Menda?a Dom¨ªnguez, que cumplir¨¢ 70 a?os el 1 de diciembre pr¨®ximo, es padre de otro juez de primera instancia. Menda?a, el decano del pleno, es un hombre de talante liberal. Desempe?a sus funciones en la misma sala en que estuvo destinado el juez instructor de la causa, Ignacio de Lecea, hasta que el pasado 22 de octubre se jubil¨®. Esta sala tiene, en medios jur¨ªdicos, reputaci¨®n de conciliadora y ben¨¦vola.

Menda?a inici¨® su carrera como funcionario en Zamora, cuando ten¨ªa 16 a?os, mientras empezaba a estudiar Derecho. Ha estado destinado en los juzgados de Puebla de Sanabria (Zamora), Quiroga (Lugo), Almendralejo (Badajoz) y Barcelona.

Otros cinco magistrados est¨¢n en puertas de la jubilaci¨®n: Julio Selva, Siro Fern¨¢ndez, Ricardo Ferrer de la Cruz, Jaume Amig¨® de Bonet y Jos¨¦ Mar¨ªa Amor¨®s. Tras la jubilaci¨®n de Menda?a, el pr¨®ximo 1 de diciembre, est¨¢ previsto que aban-donen el servicio otros dos magistrados en octubre y noviembre de 1987, y los tres restantes lo har¨¢n el 1 de enero de 1988.

Doce catalanes

El grupo de magistrados nacidos en Catalu?a es mayoritario respecto a los de las dem¨¢s comunidades: son doce y todos ellos utilizan habitualmente la lengua catalana. Ocho -entre los que figura el presidente de la Audiencia Territorial, Jaume Amig¨® de Bonet- nacieron er¨ª Barcelona, mientras que los restantes lo hicieron en Figueres, Vic y Gerona.

A pesar de que el grupo de catalanes es el m¨¢s numeroso, en algunas ocasiones los dinamizadores del proceso de catalanizaci¨®n de la Administraci¨®n de justicia han sido magistrados nacidos en otros lugares. En el mes de diciembre de 1983, un gallego, Adolfo Fern¨¢ndez Oubi?a, con la colaboraci¨®n de un valenciano, Jos¨¦ Luis Barrera Cogollos, y de un aragon¨¦s, Manuel Derqui Balbuena, redactaron la primera sentencia en lengua catalana, en un caso civil sobre una herencia, en cuya resoluci¨®n se aplic¨® un principio jur¨ªdico de derecho foral aut¨®ctono. La iniciativa de Fern¨¢ndez Oubi?a sorprendi¨® a la propia presidencia de la Audiencia Territorial, que conoci¨® el hecho cuando ya se hab¨ªa producido, al recibir al d¨ªa siguiente la felicitaci¨®n de un alto cargo de la Generalitat.

Fern¨¢ndez Oubi?a, de 53 a?os, conversador incansable y discrepante permanente, es hijo de un cacique orensano de Caldas de Rey y desciende de una familia de funcionarios judiciales. Durante dos a?os, fue oficial en la Legi¨®n. Su primer destino fue de juez instructor en Muros de Paredes (Le¨®n). All¨ª le expedientaron por primera vez al publicar un libro titulado Sociolog¨ªa para la convivencia. Luego estuvo en juzgados de Muros (La Coru?a), Reus (Tarragona), San Sebasti¨¢n, L'Hospitalet (Barcelona) y Barcelona. En 1981, a ra¨ªz de una investigaci¨®n efectuada sobre el funcionamiento de la delegaci¨®n del Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia de Barcelona, descubri¨® una doble contabilidad -un tema que vuelve a estar sobre la mesa en el caso Catalana-, acabando todo en el procesamiento de tres funcionarios, la propia delegada y otros dos altos cargos traspasados a la Generalitat, por un presunto delito de malversaci¨®n de caudales p¨²blicos. En enero de 1984, se sobresey¨® la causa a petici¨®n del fiscal, y el asunto se zanj¨® con un auto se?alando que una cosa, son las irregularidades administrativas suscitadas por el sistema presupuestario espa?ol y la pobreza de sus medios, y otra muy diferente las actividades supuestamente delictivas. Oubi?a, que inici¨® aquel procedimiento Judicial, es hoy, sin embargo, uno de los m¨¢s firmes defensores de exculpar a los querellados, incluido Jordi Pujol.

En la Audiencia hay, adem¨¢s, nueve magistrados de la Comu?idad Aut¨®noma de Valencia, siete de la de Castilla-Le¨®n, cinco gallegos, cinco aragoneses, tres de Castilla la Mancha- y tres andaluces.

Cinco mujeres

Margarita Robles Fern¨¢ndez, de 30 a?os, natural de Le¨®n aunque oresidente en Barcelona desde su infancia, fue la primera mujer que ocup¨® un lugar en el estrado en la Audiencia Provincial de Barcelona. Es miembro activo de Jueces para la Democracia y fue la ponente en la causa criminal contra los tres inspectores de polic¨ªa que resultaron condenados a seis meses de,arresto por la forma c¨®mo se produjo la muerte de un militante de los GRAPO, Juan Mart¨ªn Luna. Antes de su actual destino en Barcelona, estuvo en los juzgados de Balaguer (L¨¦rida), Bilbao y Sant Feliu de Llobregat (Barcelona). En esta ¨²ltima localidad, abri¨® una causa contra Antoni Comas, actual responsable de organizaci¨®n de Converg¨¦ncia, para examinarsus responsabilidades respecto a unos problemas en la editorial Seix y Barral, en la que era alto directivo. Margarita Robles dict¨® el procesamiento de Comas que, posteriormente, qued¨® sobrese¨ªdo, al demostrarse su inocencia en la misma sala de la Audiencia que hizo lo propio con la causa abierta en torno a la doble contabilidad de la delegaci¨®n de Educaci¨®n y Ciencia.

En los ¨²ltimos a?os, otras cuatro mujeres han llegado'a la Audiencia de Barcelona: Mar¨ªa Dolores Mandelo, Tarsila Mart¨ªnez, Celsa Pic¨® y Mercedes Morades. Como las mujeres ¨²nicamente pudieron acceder a la carrera judicial en 1961, la media de antig¨¹edad de las magistradas de Barcelona no superan los seis a?os. Por t¨¦rmino medio, los mag¨ªstrados de la Audiencia de Barcelona han dedicado 19 a?os a la administraci¨®n de justicia.

La mitad de los miembros del pleno tienen menos de 20 a?os de profesi¨®n, y entre ellos hay catorce magistrados con menos de diez a?os de actividad. Veinti¨²n magistrados han ejercido su carrera durante m¨¢s de 20 a?os y s¨®lo uno de ellos lo ha hecho durante m¨¢s de 41: Ricardo Ferrer de la Cruz, titular de una de las salas m¨¢s prestigiosas de Barcelona.

El clan de los gallegos

El grupo de magistrados gallegos es uno de los m¨¢s compactos de la Audiencia de Barcelona, aunque con escasa o nula incidencia sobre los temas judiciales, dada la disparidad de criterios que muchas veces tienen con respecto a diversos temas, incluida su opini¨®n sobre el caso Banca Catalana. Aglutinados en torno a Adolfo Fern¨¢ndez Oubi?a y Manuel Gaspar Quiroga V¨¢zquez, natural de Monforte de Lemos (Lugo), realizan colectivamente diveras actividades de tipo gastron¨®mico y l¨²dico. Los martes o los viernes se les puede sorprender en cualquier restaurante elegante de la ciudad, y el domingo, juntos, en las gradas del estadio del Club de F¨²tbol Barcelona.

Independientemente de lo anterior, y con los folclorismos al margen, en la Audiencia de Barcelona son reconocibles sobre todo dos grupos profesionales: el aglutinado en torno a los militantes del colectivo Jueces para la Democracia -heredero directo de Justicia Dernocr¨¢tica-, y el de la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura, de tendencia m¨¢s conservadora.

En Jueces para la Democracia militan, en el sentido estricto del t¨¦rmino, s¨®lo cinco magistrados, entre los que se encuentra el propio presidente de la Audiencia Provincial, Antonio Do?ate. En la Asociaci¨®n Profesional, mucho m¨¢s numerosa, est¨¢n incluidos un buen n¨²mero de magistrados, encabezados por Francisco Tal¨®n Mart¨ªnez, del secretariado estatal, y Juan Poch Serrat, presidente de la secci¨®n provincial.

Francisco Tal¨®n, 52 a?os, de Valencia, es profesor de Derecho Penal en la Universidad Central de Barcelona y amigo personal del titular de la c¨¢tedra, Joan C¨®rdoba, un letrado clave, junto con Joan Piqu¨¦ Vidal y Jordi Carreras LLansana para la defensa de los querellados de Banca Catalana. Por ¨¦sta causa, Tal¨®n se mantuvo al margen de este tema hasta que entr¨® en vigor la nueva ley Org¨¢nica del Poder Judicial, que hizo desaparecer las incompatibilidades basadas en los lazos de manifiesta amistad. Tal¨®n fue candidato a vocal d¨¦l Consejo General del Poder Judicial, pero cont¨® con la oposici¨®n de los sectores socialistas. El pasado a?o, se baraj¨® su nombre para cubrir la presidencia de la Audiencia Provincial de Bilbao.

Juan Poch, de 58 a?os, natural de Figueres (Gerona), fue en el pasado juez especial para los delitos de Prensa. Afirma que se neg¨® a convertirse en un Torquemada y en medios judiciales se recuerdan a¨²n sus sentencias, que fueron un ejemplo de liberalidad y democracia en unos a?os en que menudeaban las sanciones y condenas a periodistas, editores y escritores. Su nombre, junto con los de Enrique Lecumberri y Luis Mar¨ªa D¨ªaz de Valc¨¢rcel, forma parte de la terna de favoritos para ocupar la vacante dejada por Ces¨¢reo Rodr¨ªguez Aguilera en el Consejo General del Poder Judicial.