Espa?a acoge con hostilidad las medidas propuestas por la CE para reducir los excedentes l¨¢cteos
Los ministros de Agricultura de la Comunidad Europea (CE), y en especial el representante espa?ol, Carlos Romero, acogieron ayer con reticencias e incluso hostilidad las nuevas medidas dr¨¢sticas que les fueron presentadas para reducir de aqu¨ª a dos a?os la producci¨®n en un 6%, equivalente a seis millones de toneladas, de unos excedentes l¨¢cteos en aumento. Consciente de la necesidad de hacer algo para contener el crecimiento de t¨ªos de leche sobrante, el Consejo de Ministros, reunido ayer y hoy en la capital belga, podr¨ªa decidir aplicar algunas de las medidas propuestas por la Comisi¨®n Europea.
"La situaci¨®n en el sector lechero es absolutamente dram¨¢tica", afirm¨® Frans Andriessen, comisario europeo encargado de la Agricultura, al dar a conocer la semana pasada su plan. "Creo", a?adi¨®, que tenemos derecho a que el Consejo retome el control de la producci¨®n lechera, por que si no puede acabar desbord¨¢ndonos".El nuevo plan que Andriessen someti¨® ayer a la aprobaci¨®n de los titulares de Agricultura pretende disminuir de aqu¨ª a dos a?os la producci¨®n de leche en la Comunidad en un 65 ,equivalente a seis miliones de toneladas, en lugar del 3% de reducci¨®n acordada por los ministros el pasado me s de abril.
Junto con esa nueva reducci¨®n, el comisario sugiere la adopci¨®n tres medidas suplementarias tendentes a garantizar su implicaci¨®n efectiva. La primera consiste en que los seis pa¨ªses miembros que a¨²n fijan las cuotas de producci¨®n por lecher¨ªa lo hagan de ahora en adelante por productor, responsabilizando as¨ª m¨¢s directamente al agricultor de la eventual superaci¨®n del terho que le ha sido concedido.
La multa que deber¨¢ abonar el productor si rebasa su contingente aumenta adem¨¢s en un 33%, alcanzando as¨ª el 100% del precio indicativo del litro de leche. La posibilidad para el ganadero de lograr un incremento de la cuota si a cambio reduce sus ventas directas al consumidor queda suprimida.
Este nuevo paquete de medidas se a?ade a otras tres iniciativas que Andriessen tampoco consigui¨® hacer aprobar en octubre a los responsables de la Europa verde pero que sigue presentando: suspensi¨®n durante el invierno de la compra a precio garantizado (intervenci¨®n) de los excedentes de leche en polvo descremada, posibilidad para el Ejecutivo europeo de interrumpir en casos extremos la intervenci¨®n sobre cualquier otro producto l¨¢cteo y supresi¨®n de la llamada compensaci¨®n interregional, que auto riza a vender dentro de un mismo pa¨ªs las sobras de una zona excedentaria en otra deficitaria
El conjunto de estos proyectos l¨¢cteos de la Comisi¨®n costar¨ªan 245 millones de ECU, 14.300 millones de peseta unos. el a?o pr¨®ximo y 7.000 millones en 1988, desembolsados para estimular su puesta en pr¨¢ctica. Pero a partir del pen¨²ltimo a?o de la d¨¦cada el ahorro presupuestario ser¨ªa de 184.800 millones de pesetas.
Siguen los excedentes
Aun en el caso hipot¨¦tico de que el Consejo d¨¦ su visto bueno a las nuevas y antiguas propuestas presentadas por Andriessen en nombre de la Comisi¨®n, los excedentes de leche seguir¨ªan siendo en 1988 de 3,5 millones de toneladas, o incluso de 8,15 millones si a la primera cifra se le agregan las ventas subvencionadas.
En su ofensiva contra los excedentes, el ¨®rgano ejecutivo europeo ha recibido un inesperado espaldarazo del Parlamento Europeo, que exigi¨®, al votar la semana pasada en primera lectura el presupuesto de la Comunidad Europea para 1987, una reducci¨®n de la producci¨®n l¨¢ctea superior a la preconizada por la Comisi¨®n.
Las trabas a las propuestas de Andriessen surgen m¨¢s bien por parte de los pa¨ªses mediterr¨¢neos de la CE opuestos a una nueva disminuci¨®n de la cuota. Despu¨¦s de haber intentado en vano evitar que se aplicase la primera reducci¨®n del 3% acordada en abril, Espa?a recurri¨® la decisi¨®n al Tribunal de Justicia europeo por considerar que infring¨ªa su tratado de adhesi¨®n a la Comunidad, que le obligaba ya a producir aproximadamente un 5% menos que en 1983.
"Para un pa¨ªs como el nuestro, ligeramente deficitario en leche fresca y algo m¨¢s en derivados l¨¢cteos", explicaba un portavoz de la representaci¨®n espa?ola ante la CE, "un nuevo baj¨®n no solamente incrementar¨ªa nuestra dependencia externa, sino que nos plantear¨ªa el delicado problema de tener que repartir el recorte de la producci¨®n por comunidades aut¨®nomas y centrales lecheras".
La postura espa?ola es compartida por Grecia, que no desea aumentar sus importaciones l¨¢cteas de sus vecinos socialistas, m¨¢s cercanos que sus socios comunitarios, e Italia que considera ya excesivo el reciente deterioro de su tasa de auto abastecimiento en los ¨²ltimos a?os.
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