Los socialdem¨®cratas acusan a Kohl de haber violado el embargo contra Sur¨¢frica
La oposici¨®n socialdem¨®crata acus¨® ayer en el Parlamento federal, en Bonn, al canciller Helmut Kohl de haber dado su aprobaci¨®n a la venta al r¨¦gimen de Sur¨¢frica de los planos de un submarino alem¨¢n, violando as¨ª el embargo de armas decretado contra Pretoria. Socialdem¨®cratas y verdes han solicitado la creaci¨®n de una comisi¨®n parlamentaria para determinar las responsabilidades pol¨ªticas y penales del caso.
A la misma hora en que el Gobierno se defend¨ªa de estos ataques, unas parlamentarias del Partido de los Verdes de Hamburgo irrump¨ªan en un almac¨¦n de la ciudad, y descubr¨ªan una partida de armas con destino a Johannesburgo, seg¨²n afirmaron. Los verdes de Hamburgo tienen tambi¨¦n informaci¨®n sobre el env¨ªo a Sur¨¢frica, v¨ªa esa ciudad, de pistolas espa?olas marca Star y de pistolas Luger, fabricadas en Baviera.Seg¨²n unos documentos confidenciales de la empresa de ingenieros IKL, implicada en la venta de planos de submarinos de los astilleros H¨®waldt-Deutsche Werft (HDW) a Pretoria, el canciller, Helmut Kohl, y el presidente b¨¢varo, Franz Josef Strauss, se mostraron "muy interesados" en esta operaci¨®n. Los astilleros interpretaron este "inter¨¦s" como una aprobaci¨®n impl¨ªcita y entregaron al r¨¦gimen de Pretoria los planos del submarino.
El secretario de Estado del Gobierno de Kohl, Waldemar Schreckensberger, llam¨® el 23 de julio de 1984 a los astilleros. Como consecuencia de su llamada, la direcci¨®n decidi¨®: "Hacer efectivo el contrato. Comenzar el trabajo. Se recibir¨¢ el permiso definitivo tras las vacaciones parlamentarias", seg¨²n cita el diario Bild.
El ministro de la canciller¨ªa, Wolfgang Schaeuble, rechaz¨® ayer las acusaciones y manifest¨® que "el canciller decidi¨®, dada su preocupaci¨®n por los puestos de trabajo en los astilleros, estudiar la posibilidad de esta operaci¨®n". Pero no se solicit¨® formalmente el permiso, que, seg¨²n se?ala ahora el Gobierno, no se habr¨ªa dado. Cuando el Ejecutivo supo de la entrega de los planos a Pretoria, inst¨® la apertura de un sumario contra los responsables.
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