La juez que denunci¨® a una pareja que estaba bes¨¢ndose en un bar no podr¨¢ seguir ejerciendo en Extremadura

El presidente de la Audiencia Territorial de C¨¢ceres, Jes¨²s Gonz¨¢lez Jubet, se ha negado a renovar a Antonio Navarro Castillo su cargo como juez de provisi¨®n temporal de Azuaga, localidad en la que el pasado d¨ªa 6 apareci¨® ahorcado el joven Diego S¨¢nchez Molina, de 21 a?os, condenado a cinco meses de arresto mayor como consecuencia de una denuncia promovida por el propio juez. La condena por esc¨¢ndalo p¨²blico guarda relaci¨®n con la denuncia formulada por encontrarse bes¨¢ndose en un bar.

Condena "leve"

Julio Cienfuegos Linares, uno de los jueces firmantes de la sentencia, manifest¨® ayer a este peri¨®dico que la condena "era leve respecto a los hechos que hab¨ªan ocurrido".

El presidente de la Audiencia. Territorial, Gonz¨¢lez Jubet, preguntado por esta opini¨®n, se?al¨® "pese a no conocer el asunto a fondo, lo cierto es, que jam¨¢s me escandalizar¨ªa porque una pareja se bese y se acaricie; muy al contrario, me producir¨ªa si no envidia, s¨ª alegr¨ªa". Gonz¨¢lez Jubet plante¨® la interrogante sobre "?qu¨¦ es enc¨¢ndalo p¨²blico?" y aludi¨® a la necesidad del jurado "porque es a la sociedad a quien corresponde decidir lo que es o no esc¨¢ndalo p¨²blico.Hay que cambiar unas leyes obsoletas que a veces encorsetan las decisiones de los jueces, pero creo que yo no hubiera dictado esa sentencia".

El juez Antonio Navarro contin¨²a en paradero desconocido, mientras siguen las especulaciones sobre los motivos que llevaron a la familia del joven Diego S¨¢nchez a abandonar los servicios de un abogado de pago y rechazar la presencia de testigos que inicialmente iban a declarar a favor de la pareja. Para ma?ana, jueves, est¨¢ anunciada una manifestaci¨®n en Azuaga as¨ª como un paro general de toda la poblaci¨®n por lo que se considera un "abuso judicial". Una coordinadora vecinal se encargar¨¢ de gestionar la reapertura del caso y la posibilidad de emprender acciones legales contra Antonio Navarro.

Navarro Castillo denunci¨® en febrero de 1986 a Diego S¨¢nchez y a su novia Mar¨ªa Dolores Mu?oz, de 16 a?os, que se encontraban en una mesa del bar Las Conchas de Azuaga, pr¨®xima a la que ocupaba el juez de distrito, e iniciaron, seg¨²n la declaraci¨®n de Navarro, continuas "efusiones er¨®ticas". Seg¨²n la sentencia que posteriormente dict¨® la Audiencia Provincial de Badajoz, dichas efusiones er¨®ticas consistieron en ".descansar ella una pierna sobre las rodillas de su acompa?ante, mientras uno y otro introduc¨ªan una mano en los pantalones de su pareja".

Diego S¨¢nchez pas¨® aquella noche en el calabozo municipal y al d¨ªa siguiente fue trasladado a la prisi¨®n de Badajoz, en donde pas¨® ocho d¨ªas y sufri¨®, seg¨²n declaraciones de su novia, intentos de violaci¨®n, robos y palizas. Al regresar a su domicilio, el joven experiment¨® depresiones nerviosas, de las que fue tratado en el ambulatorio local.

Esc¨¢ndalo p¨²blico

La Audiencia Provincial de Badajoz conden¨® el pasado mes de noviembre a Diego S¨¢nchez a cinco meses de c¨¢rcel, 30.000 pesetas de multa y siete a?os de inhabilitaci¨®n para ejercer la docencia por un delito de esc¨¢ndalo p¨²blico y otro de desacato a la autoridad. La condena para la joven Mar¨ªa Dolores Mu?oz fue de dos meses de arresto, 20.000 pesetas de multa y tres a?os de inhabilitaci¨®n para ejercer la docencia. Un a?o despu¨¦s de los hechos, Diego S¨¢nchez apareci¨® ahorcado, colgado de una soga atada a una viga del corral de su domicilio.