150.000 pesetas de multa para una abuela que se resisti¨® un desalojo

Rosario L¨®pez Garc¨ªa de 53 a?os, la abuela analfabeta que con el desalojo de la vivienda de sus metros lanz¨® insultos contra el Rey, la polic¨ªa, ha sido condenada por la Audiencia Nacional a varias multas que totalizan 152.000 pesetas. Si no abona las multas, como es probable, ya que est¨¢ declarada insolvente, el tribunal ha fiado el cumplimiento de dos meses y 10 d¨ªas de arresto sustitutorio. El juez ha rebajado la pena atendiendo a la "nula cultura de la procesada y el entorno social ¨ªnfimo en el que transcurre su vida".El tribunal ha condenado a Rosar¨ªo L¨®pez como autora de sendos de sendos delitos de injurias al jefe del Estado y desacato y atentado contra la autoridad, pero con la atenuante de trastorno mental transitorio incompleto.

La sentencia se?ala que el 26 de Junio de 1984 se realiz¨® el desalojo ordenado por el gobernador de Madrid en el habit¨¢culo ocupado por Emiliana Benito y sus dos hijos de corta edad, nuera y nietos, respectivamente, de Rosario L¨®pez, en la Unidad Vecinal de Absorci¨®n (UVA) de Villaverde Alto. Rosario, que se encontraba en tratamiento m¨¦dico por desarreglos de tipo ps¨ªquico, comprob¨¦ que la techumbre de la vivienda estaba siendo desmantelada y uno de sus nietos, de ocho meses, continuaba en el interior. La mujer pidi¨® a la polic¨ªa que suspendieran el desalojo hasta que sacara de la vivienda al ni?o y los enseres familiares. Al ser denegada la petici¨®n, Rosario, de forma descompuesta, dirigi¨® insultos contra el Rey y el gobernador y calific¨® de "asesinos" a la polic¨ªa. Los polic¨ªas detuvieron a la mujer, que en el forcejeo result¨® levemente lesionada, al igual que tres de los agentes.

El tribunal estima que las injurias al Rey deben ser consideradas como leves, rebajando en un grado la pena, debido a que Ia nula cultura de la procesada y el entorno social infimo en el que transcurre su vida (la UVA de Villaverde es una de las zonas m¨¢s pobres de Madrid) no le permiten entender que la expresi¨®n pronunciada sea grave, ni eficaz para menospreciar el buen nombre de nuestro soberano".

La sentencia considera que los insultos al gobernador y a la polic¨ªa constituyen delito de desacato, mientras que el forcejeo con los agentes se estima como una resistencia grave.