Croissier aborda esta semana con la CGE francesa el futuro de Standard

El titular de Industria, Luis Carlos Croissier, y el presidente de la Compagnie G¨¦n¨¦rale d'Electricit¨¦ (CGE) de Francia y del consorcio de telecomunicaciones Alcatel NV, Pierre Suard, mantendr¨¢n esta semana una nueva entrevista, que es considerada de vital importancia para el futuro de Standard El¨¦ctrica, inmersa en un proceso de reconversi¨®n sobre cuyo coste y n¨²mero de trabajadores afectados discrepan las partes negociadoras. La reuni¨®n estaba prevista para el jueves pasado, pero fue aplazada por coincidir con la moci¨®n de censura presentada contra el Gobierno. Ser¨¢ la segunda vez que se vean Suard y Croissier en las dos ¨²ltimas semanas.

En la anterior entrevista, el presidente de CGE-Alcatel se mostr¨® contrario al planteamiento de la Administraci¨®n -que contaba con el respaldo de UGT y Telef¨®nica-, seg¨²n el cual la reducci¨®n del excedente laboral (3.700 personas en un per¨ªodo de cuatro a?os) s¨®lo se podr¨¢ realizar a base de bajas voluntarias y jubilaciones anticipadas y sin recurrir a la posibilidad de despidos.Seg¨²n la ¨²ltima propuesta elaborada por las partes comprometidas en la reconversi¨®n de Standard, Telef¨®nica se compromet¨ªa, por su parte, a asumir un aumento de 25.000 millones de pesetas en las compras que realizar¨¢ a Standard en los pr¨®ximos cuatro a?os. Esto supone incrementar en casi un 10% los 250.000 millones de pesetas que la filial espa?ola de Alcatel tiene previstos vender a Telef¨®nica entre 1987 y 1991. A pesar de estas mejoras, ese planteamiento es caro para Alcatel (deber¨ªa desembolsar de manera inmediata unos 15.000 millones) y no asegura la viabilidad de su filial.

Las negociaciones del plan de reconversi¨®n de Standard han vuelto a encontrar en las pasadas semanas fuertes escollos al abordarse precisamente el punto clave, que es el de su coste econ¨®mico. En una posici¨®n de fuerza por ambas partes, desde hace meses tanto UGT como la propia Administraci¨®n han insistido en que para reducir el personal sobrante en Standard -unas 3.700 personas de forma inmediata, en opini¨®n de sindicatos y Administraci¨®n, y algo m¨¢s, seg¨²n la empresa- no estaban dispuestos a aceptar otra f¨®rmula que no fuera la de las jubilaciones anticipadas y bajas voluntarias.

El problema importante que origina este planteamiento, con el que no se muestran de acuerdo su nuevo propietario, Alcatel NV, es el de su coste, que a¨²n no est¨¢ totalmente concretado, pero que podr¨ªa rondar, seg¨²n los baremos que se manejan en estos momentos, los 50.000 millones actuales. Aproximadamente la mitad tendr¨ªan que ser aportados por la empresa, y el resto, por la Administraci¨®n. Esas cantidades ascender¨¢n notablemente si se cuantifican en pesetas de dentro de cuatro a?os. Seg¨²n valoraci¨®n sindical, el coste de la reconversi¨®n al cabo de los cuatro a?os podr¨ªa dispararse hasta los 80.000 millones.

Dudas sobre la viabilidad

El importante monto de esa cantidad ha levantado ampollas en el cuartel central de Alcatel, donde se resisten a aceptar que ¨¦sa sea la ¨²nica soluci¨®n. El estancamiento en la resoluci¨®n de un contencioso que se est¨¢ alargando m¨¢s de lo previsto y deseado por las partes implicadas ha dado lugar a que, desde hace semanas, las negociaciones se est¨¦n llevando al m¨¢s alto nivel.El mensaje transmitido por Suard a Croissier ha sido claro: la soluci¨®n que se pretende mediante bajas voluntarias y jubilaciones anticipadas es muy cara, m¨¢s cara que el plan de viabilidad presentado por Standard y rechazado por la comisi¨®n negociadora. Como se?al¨® Suard en su primera entrevista de este mismo mes al titular espa?ol de Industria, Alcatel tiene dudas incluso de que esas posiciones puedan considerarse como un verdadero plan, con los interrogantes a?adidos de cu¨¢ndo podr¨¢ ser viable la compa?¨ªa. Sin embargo, seg¨²n estudios que se manejan en la propia comisi¨®n de seguimiento, una vez contabilizada la venta de Marconi, de cuyos cr¨¦ditos tiene que hacerse cargo, Standard puede volver a la rentabilidad en 1989.

Tal como est¨¢ la situaci¨®n tras las ¨²ltimas reuniones de la comisi¨®n de seguimiento, se conf¨ªa en que en un plazo de cinco a?os puedan acogerse a la jubilaci¨®n anticipada unas 2.500 personas en Standard, que con las que podr¨ªan aceptar la baja voluntaria se llegar¨ªa a las 3.700 como m¨ªnimo. Los jubilados percibir¨ªan el ciento por ciento de su salario m¨¢s el incremento anual y una paga extraordinaria.

Otro hecho que parece estar influenyendo es el de la soluci¨®n que pueda darse para Marconi, la filial de Standard especializada en tecnolog¨ªa de defensa y a la que se est¨¢ intentando encontrar comprador directamente desde todas las partes que componen la comisi¨®n de seguimiento para la reconversi¨®n de Standard y de su subsidiaria. Hace menos de un mes, Antonio Puerta, secretario general del metal de UGT, se desplaz¨® a la Rep¨²blica Federal de Alemania para entrevistarse con los responsables sindicales de Siemens, cuya candidatura parece contar con las mayores posibilidades para hacerse con Marconi. Y, recientemente, tanto el director general de Electr¨®nica e Inform¨¢tica como el consejero delegado de Telef¨®nica han estado visitando las instalaciones de la firma alemana occidental en aquel pa¨ªs y entrevist¨¢ndose con la alta direcci¨®n de Siemens.