Desconcierto ante las medidas monetarias

Los mercados de valores confirmaron, en parte, las expectativas del cierre anterior consiguiendo mejoras en la mayor¨ªa de los sectores. Sin embargo, la sesi¨®n no respondi¨® en un tono de firmeza, pues fueron muy pocos los valores que quedaron sin contratar por falta de oferta o que tuvieron que confeccionar listas de compradores. El ambiente estaba un tanto enrarecido desde primera hora de la ma?ana, como se encargaron de corroborar los valores el¨¦ctricos, bien porque los datos que originaron la reacci¨®n no eran tan buenos, bien porque se esperaban noticias sobre el mercado monetario.Como el d¨ªa anterior, esta noticia lleg¨® tarde al patio de operaciones y sembr¨® el desconcierto, pues un endurecimiento en la pol¨ªtica monetaria, mediante la elevaci¨®n del coeficiente de caja y una previsible subida de los tipos de inter¨¦s, no puede tener una lectura positiva por mucha buena voluntad que se ponga o por mucho car¨¢cter coyuntural que pueda tener.

El negocio hab¨ªa mejorado discretamente y, aunque no estaba muy claro el comportamiento del mercado para esta ma?ana, todo quedaba preparado para un nuevo pulso entre papel y dinero sin que mediaran otros factores. La proximidad de la decisi¨®n del Banco de Espa?a con la publicaci¨®n del IPC de marzo lleva a pensar que hay que recomponer la interpretaci¨®n de la subida de los precios. De creer que no es tan malo como se esperaba, hay que pasar a afirmar que no es tan bueno como parec¨ªa.

La ¨²nica respuesta decidida ha sido la de los valores industriales, con subidas sectoriales de hasta 15,80 puntos, mientras que el resto adornaba unos resultados discretos con alguna que otra subida anecd¨®tica. La posici¨®n al cierre era de calma, aunque no se pod¨ªa ocultar la preocupaci¨®n que hab¨ªan producido los ¨²ltimos acontecimientos.