La 'guerra de la pasta' entre la CE y Estados Unidos sigue sin encontrar soluci¨®n

La Comisi¨®n Europea dio ayer por pr¨¢cticamente declarada la llamada guerra de la pasta con EE UU. "A menos que se produzca un milagro a ¨²ltima hora", afirm¨® en una conferencia de prensa el comisario europeo Willy de Clercq, encargado del comercio exterior, "va a estallar un conflicto ( ... )". El comisario belga hizo esta declaraci¨®n despu¨¦s de haber informado a los embajadores de los doce ante la Comunidad Europea (CE) de que la negociaci¨®n entre Bruselas y Washington "se encontraba, desgraciadamente, en un callej¨®n sin salida" tres d¨ªas antes de que expire el ultim¨¢tum dado por EE UU hasta el 2 de agosto.De Clercq responsabiliz¨® del actual bloqueo a la Administraci¨®n del presidente Ronald Reagan, que "se ha mostrado inflexible impidiendo que lleg¨¢semos a un compromiso", y expres¨® el temor de que la guerra del espagueti repercuta negativamente sobre "el clima general de las relaciones comerciales entre EE UU y la CE que no es de por s¨ª muy bueno".

El responsable del comercio exterior de la Comunidad vaticin¨® que la semana pr¨®xima la Casa Blanca tomar¨¢ medidas unilaterales que gravar¨¢n fuertemente a exportaciones comunitarias a EE UU por valor de 35 millones de d¨®lares (4.445 millones de pesetas).

En consecuencia, el ¨®rgano ejecutivo europeo propondr¨¢ a los doce en pleno mes de agosto que adopten contramedidas equivalentes, pero De Clercq se neg¨® a revelar en qu¨¦ consistir¨ªan. "Es demasiado prematuro para dar indicaciones sobre nuestra respuesta", afirm¨®, "pero s¨ª puedo decir que estamos listos y hemos tomado todas las disposiciones pr¨¢cticas necesarias" incluida la anulaci¨®n de las vacaciones de algunos funcionarios.

Quedar¨¢ entonces por ver si la Administraci¨®n norteamericana decide, a su vez, replicar con nuevas sanciones a la Comunidad adentr¨¢ndose as¨ª por la peligrosa espiral que puede generar un conflicto de mayor envergadura que el actual, que, como record¨® De Clercq, s¨®lo "afecta a un peque?o flujo de nuestros intercambios comerciales". Tan s¨®lo el 5% de las pastas consumidas en EE UU son de origen comunitario.

El principal punto de discrepancia en la negociaci¨®n han sido las subvenciones (restituciones, en la jerga comunitaria) a la exportaci¨®n de las que se benefician las pastas comunitarias, principalmente italianas, vendidas del otro lado del Atl¨¢ntico. Estas ayudas fueron disminuidas el a?o pasado en un 20% y el Ejecutivo europeo estaba dispuesto a reducirlas ahora en un 15% suplementario, cifra considerada insuficiente por sus interlocutores norteamericanos, que solicitaron un recorte del 45% como pen¨²ltimo paso hacia su total eliminaci¨®n.

A este desacuerdo se a?ad¨ªa otro, relativamente secundario, sobre las condiciones, que Washington deseaba endurecer, en que los fabricantes de pasta de la, CE pod¨ªan disfrutar del r¨¦gimen de producci¨®n en franquicia que les permite importar cereales de EE UU y Canad¨¢ sin abonar el arancel comunitario porque su producci¨®n iba a ser exportada al nuevo continente. Estos fabricantes no ten¨ªan, en cambio, derecho a las restituciones concedidas a los que abonaban los derechos aduaneros.