Picaduras venenosas
Las heridas, raramente graves, pueden ser mortales en caso de alergia
El contacto con la naturaleza, propiciado por las vacaciones y el buen tiempo, nos expone al peligro de los animales venenosos. En nuestra ¨¢rea geogr¨¢fica, el n¨²mero de especies ponzo?osas y su capacidad t¨®xica son menores que en otras latitudes. Los principales riesgos se derivan de las picaduras de insectos y ar¨¢cnidos y de las mordeduras de serpientes. Estos accidentes no tienen, generalmente, consecuencias graves, y la asistencia m¨¦dica no suele ser necesaria; pero, en el caso de reacci¨®n al¨¦rgica, el tratamiento debe ser urgente por su posible: mortalidad.
El peligro de morir por picadura o mordedura de un animal venenoso es m¨ªnimo en Espa?a. Las heridas venenosas m¨¢s significativas por la mortalidad que ocasionan son las picaduras del grupo de los artr¨®podos, donde se incluyen insectos y ar¨¢cnidos. Estas heridas pueden ser m¨¢s graves que las producidas por animales de apariencia mucho m¨¢s peligrosa como las serpientes.Del mill¨®n de artr¨®podos conocidos en todo el mundo, las avispas y abejas son las responsables de la mayor¨ªa de muertes registradas en Espa?a. El riesgo de la picadura de estos insectos himen¨®pteros se debe a algunas reacciones de hipersensibilidad, ya que su toxicidad es escasa y se necesitan varios cientos de inoculaciones para causar la muerte.
Lo normal es que las picaduras de avispas y abejas s¨®lo produzcan una hinchaz¨®n de unos dos cent¨ªmetros, p¨¢lida al principio y posteriormente sonrosada, caliente, dolorosa y con sensaci¨®n de picor. Son lesiones autolimitadas y que pr¨¢cticamente no requieren tratamiento.
Antis¨¦ptico
Basta con limpiar la herida con agua y jab¨®n, aplicar un antis¨¦ptico que no coloree la piel y fomentos fr¨ªos. Si la picadura es de abeja, adem¨¢s hay que extraer el aguij¨®n con unas pinzas, cuidadosamente para no inocular m¨¢s veneno, porque, normalmente, lleva la gl¨¢ndula venenosa adosada.Como medidas preventivas, conviene no llevar ropa de colores llamativos o con un patr¨®n floreado si se va por un lugar de colmenares o por donde pueda haber avisperos. Tampoco es recomendable usar colonias, perfumes o lociones de afeitar, que pueden atraer a estos himen¨®pteros. La ropa floja puede resultar peligrosa y son aconsejables las camisas de manga larga y con los pu?os abotonados.
Las moscas, mosquitos y otros d¨ªpteros carecen de trascendencia toxicol¨®gica y no producen reacciones de hipersensibilidad. Su mayor peligro es que pueden actuar como veh¨ªculos transmisores de enfermedades.
Otro tipo de picaduras a tener en cuenta son las de las chinches, unos insectos de color rojo, de unos cinco mil¨ªmetros de largo, que abundan en casas viejas y desaseadas, especialmente en las camas durante el verano. La lesi¨®n que producen cede al poco rato y s¨®lo es dolorosa en el momento de la inoculaci¨®n.
Los pelos de algunos insectos, como los de la procesionaria del pino, tambi¨¦n pueden provocar lesiones. Esta oruga ocasiona alteraciones digestivas, fiebre y una erupci¨®n que puede extenderse por el rascado. En opini¨®n de Benjam¨ªn Solsona-Narb¨®n, cirujano pedi¨¢trico del hospital Miguel Servet, de Zaragoza, para las orugas es v¨¢lida la ley general seg¨²n la cual las de aspecto m¨¢s peligroso son las m¨¢s inofensivas, y viceversa. Como tratamiento aconseja retirar los pelos urticantes mediante una tira de esparadrapo, lavar las lesiones y aplicar un antis¨¦ptico.
Dentro de la clase de los ar¨¢cnidos, son particularmente peligrosos los escorpiones y las ara?as. Las especies de escorpiones europeos son relativamente poco t¨®xicas en comparaci¨®n con las americanas. Su picadura no suele ser mortal en el adulto, pero s¨ª puede serlo en el ni?o peque?o. El escorpi¨®n o alacr¨¢n m¨¢s frecuente en nuestro pa¨ªs tiene de seis a ocho cent¨ªmetros y es de color amarillento. Tiene h¨¢bitos nocturnos y se refugia en lugares oscuros y frescos durante el d¨ªa. Su picadura produce una gran hinchaz¨®n y es muy dolorosa.
Las ara?as m¨¢s peligrosas son la tar¨¢ntula y la ara?a negra. La primera es de color pardo, con franjas claras sobre el abdomen; la ara?a negra se distingue por unas manchas rojas en el abdomen. Las picaduras de ara?as y escorpiones tienen un tratamiento similar a las de los himen¨®pteros, pero conviene a?adir un analg¨¦sico porque el dolor es mucho m¨¢s intenso y prolongado.
Garrapatas
La garrapata es un ar¨¢cnido que no pica, sino que se fija a la piel. Las molestias empiezan a los tres o cuatro d¨ªas y se acompa?an de enrojecimiento y lesiones diversas. El tratamiento consiste en su extracci¨®n con pinzas. Esta maniobra, seg¨²n Solsona-Narb¨®n, es preferible a la aplicaci¨®n de un cigarrillo encendido, o a untar vaselina o aceite para provocar su asfixia.Las reacciones m¨¢s graves, excluidas las al¨¦rgicas, son las derivadas de la mordedura de serpientes. En Espa?a viven 13 especies, de las cuales, las culebras son pr¨¢cticamente inofensivas, pese a la repulsi¨®n que suelen provocar, y s¨®lo las v¨ªboras -la ¨¢spid, la de Seoane y la hocicuda- son realmente peligrosas. Su veneno act¨²a sobre el sistema vascular y puede ocasionar un cuadro similar al gangrenoso. Conviene administrar analg¨¦sicos y practicar un torniquete por encima de la herida para que no progrese el veneno. Estas medidas son suficientes para tratar la mordedura de la v¨ªbora hocicuda, pero, no as¨ª para las lesiones causadas por la v¨ªbora de Seoane y la ¨¢spid, que requieren un ant¨ªdoto espec¨ªfico.
En el tel¨¦fono 91 / 262 04 20, del Centro Nacional de Toxicolog¨ªa, se puede obtener asesoramiento m¨¦dico durante las 24 horas del d¨ªa.
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