La subida de precios asusta a la inversi¨®n

Los mercados de valores se han mostrado incapaces de reaccionar ante la posibilidad de que el ¨ªndice de precios al consumo del mes pasado se sit¨²e en un punto, con lo que se quebrar¨ªa la trayectoria favorable a las previsiones gubernamentales. La noticia fue como un jarro de agua fr¨ªa para un mercado sumido en un mar de dudas y en el que papel y dinero no consiguen imponerse. Aun as¨ª, las partidas vendedoras no han resultado excesivas y las bajas se han mantenido en un nivel discreto. La situaci¨®n de los ¨ªndices, muy pr¨®xima a los m¨¢ximos anuales, est¨¢ provocando una serie de tensiones que suelen desembocar en unas sesiones pr¨¢cticamente equilibradas a pesar de las realizaciones de beneficios y de las tomas de posiciones.Una mala noticia no entraba en las previsiones de los inversores, aunque ¨²ltimamente no se prestaba demasiada atenci¨®n a todo aquello que sucede fuera de los mercados. Las posiciones al cierre del d¨ªa anterior no han aguantado el ligero empuje con que el papel ha recibido una evoluci¨®n negativa de la tasa de inflaci¨®n, al tiempo que el dinero ha vuelto a replegarse y s¨®lo en algunos casos ha insistido en tomar posiciones, entre ellos alguna sociedad el¨¦ctrica cuyo primer corro hubo de soportar una inexistente presi¨®n vendedora.

Los valores m¨¢s vol¨¢tiles sufrieron las consecuencias con mayor rapidez que el resto, pues la velocidad contin¨²a siendo un elemento fundamental para moverse en medio de ellos. El grupo sider¨²rgico pierde algo m¨¢s de 20 puntos, mientras que el resto soporta la situaci¨®n sin demasiados problemas. Telef¨®nica rompi¨® el discreto equilibrio de los grandes y contribuy¨® a ese nuevo retroceso del ¨ªndice, esta vez m¨¢s fuerte que los anteriores. El cierre no ofrec¨ªa variaciones sustanciales, pues el dinero, ahora m¨¢s que nunca, se muestra cauteloso en sus decisiones.