Spasski apuesta por Karpov

El franco-sovi¨¦tico Boris Spasski, ex campe¨®n del mundo, manifest¨® ayer, durante una conferencia de prensa, que Karpov tiene una clara ventaja psicol¨®gica en el encuentro frente a Kasparov. "Es m¨¢s sencillo ser aspirante que defender el t¨ªtulo" argument¨® Spasski. "Por otra parte -a?adi¨®- Karpov demostr¨® hallarse en un gran momento cuando elimin¨® a Sokolov en Linares, en la final de candidatos. Supo reunir todas sus energ¨ªas y explotarlas de manera ¨®ptima".Los motivos esgrimidos por el ex campe¨®n para apostar por Karpov no se limitan a aspectos t¨¦cnicos. Para Spasski "Kasparov se ha ocupado ¨²ltimamente de muchas cosas no relacionadas con el ajedrez y eso se tiene que notar. Por el contrario, el aspirante lleva una vida m¨¢s f¨¢cil, sin tantos sobresaltos". Estas declaraciones de Spasski resultan muy significativas porque fue precisamente ¨¦l quien bautiz¨® a Florencio Campomanes, presidente de la federaci¨®n internacional, como "Karpomanes", a ra¨ªz de la cancelaci¨®n del primer encuentro Karpov-Kasparov.

Con relaci¨®n a su hist¨®rico encuentro con Bobby Fischer, celebrado en Reijiavik (Islandia), hace 15 a?os, Spasski reconoci¨® ayer que perdi¨® el t¨ªtulo merecidamente. "Fischer es uno de los mejores de todos los tiempos. En ese encuentro, ¨¦l jug¨® mejor que yo y por eso gan¨®". Spasski admiti¨® tambi¨¦n que fue muy mal recibido en la URSS tras aquella derrota, sobre todo por el coronel Baturinski, alto directivo de la federaci¨®n sovi¨¦tica, del que cit¨® esta frase textual: "Ten¨ªa que haberle ganado a Fischer. Es imposible que juegue mejor que usted".

El ex campe¨®n confirm¨® asimismo que fue vetado repetidamente para jugar torneos internacionales tras perder el t¨ªtulo. Unos a?os despu¨¦s se cas¨® con una ciudadana francesa que trabajaba en Mosc¨² y emigr¨® a Par¨ªs tras llegar a un acuerdo verbal con las autoridades sovi¨¦ticas: libertad de residencia a cambio de fidelidad. El pacto se mantuvo hasta que Spasski no fue seleccionado para representar a su pa¨ªs en el encuentro Uni¨®n Sovi¨¦tica-Resto del Mundo, lo que le indujo a tomar una decisi¨®n irreversible: jugar bajo la bandera de Francia en la Olimpiada de ajedrez de Sal¨®nica (Grecia), en 1984.