Falta de coordinaci¨®n en la implantaci¨®n del gas natural en Tres Cantos, seg¨²n la empresa
La sustituci¨®n del gas manufacturado por gas natural en Tres Cantos -n¨²cleo urbano de unos 14.000 habitantes dependiente de Colmenar Viejo (Madrid)- ha sufrido retrasos por la falta de coordinaci¨®n en los trabajos de adaptaci¨®n de las instalaciones dom¨¦sticas a la nueva fuente energ¨¦tica, seg¨²n reconoci¨® ayer An¨ªbal Ruiz, gerente de conversi¨®n de Gas Madrid. El 40% de los 2.900 abonados de la zona lleva 16 d¨ªas sin agua caliente ni calefacci¨®n; el plazo previsto por la compa?¨ªa para restablecer el suministro era inicialmente de una semana.
Ruiz afirm¨® ayer que el suministro quedar¨¢ restablecido en la mayor¨ªa de las viviendas a finales de semana. El gerente de conversi¨®n justific¨® la "aparente improvisaci¨®n" por el adelantamiento de los trabajos en cerca de dos meses sobre lo previsto. "Las obras iban a comenzar en noviembre, pero los rigores climatol¨®gicos de la zona de Tres Cantos obligaron a acelerar su puesta en marcha para aprovechar el buen tiempo".Mientras, los 1.200 vecinos que a¨²n no pueden hacer uso regular del gas natural han hecho acopio de radiadores para combatir temperaturas que no se quedan muy lejos de los cero grados. Ducharse con agua caliente es algo que tampoco conocen desde el 28 de septiembre, d¨ªa en que se interrumpi¨® el suministro de gas ciudad para dar paso a la nueva fuente energ¨¦tica. ?nicamente se les permite, mientras llegan los recambios de las instalaciones, que se encienda la cocina, con la precauci¨®n de no abrir los quemadores m¨¢s de un tercio de su apertura m¨¢xima.
Tres Cantos es la experiencia piloto de un plan que prev¨¦ la adaptaci¨®n de los equipos de 475.000 usuarios en la regi¨®n en ocho a?os. Las operaciones, que tienen un coste total de 25.000 millones de pesetas, correr¨¢n por cuenta de Gas Madrid. Conforme vaya implant¨¢ndose la nueva fuente energ¨¦tica, las viviendas quedar¨¢n cerca de una semana sin suministro regular de gas, seg¨²n los c¨¢lculos de la compa?¨ªa. Sin embargo, la experiencia piloto ha sacado a relucir un sinn¨²mero de dificultades que ponen en la cuerda floja las previsiones.
Protestas vecinales
El Ayuntamiento de Colmenar Viejo ha dirigido sus quejas a la Direcci¨®n de Consumo de la Comunidad de Madrid por los retrasos y los trastornos ocasionados a los vecinos. Antonio Osuna, primer teniente de alcalde y miembro de la agrupaci¨®n de electores de Tres Cantos, define la situaci¨®n actual como "ca¨®tica"."Se han producido ya dos accidentes, uno en una caldera y otro en una cocina, quiz¨¢ provocados por la imprudencia de los vecinos que no pueden soportar m¨¢s la situaci¨®n", afirm¨® ayer Osuna. "En las viviendas que cuentan ya con suministro se han detectado fugas, y algunos aparatos se han averiado al tomar contacto con el gas natural".
El gerente de conversi¨®n de Gas Madrid afirm¨® ayer que la introducci¨®n del gas natural en Tres Cantos se est¨¢ haciendo "de una manera quiz¨¢ un poco lenta, pero segura". An¨ªbal Ruiz reconoci¨® que el tiempo de interrupci¨®n del suministro ha superado las previsiones. "Con un mayor rodaje de los operarios y una mejor coordinaci¨®n se podr¨¢n cumplir perfectamente los plazos", afirm¨®.
Para introducir el gas natural, el ¨¢rea metropolitana ha sido dividida en 200 sectores, con unos 200.000 abonados cada uno. Los operarios recorrer¨¢n las zonas para elaborar un censo y comprobar el estado de las instalaciones. Los trabajos de implantaci¨®n del gas natural, que se har¨¢n sector por sector, comenzar¨¢n habitualmente los domingos por la noche. En unas horas, las conducciones podr¨¢n ser utilizadas por la nueva fuente de energ¨ªa, que s¨®lo podr¨¢ usarse con precauci¨®n en las cocinas.
Los operarios volver¨¢n por tercera vez, con los recambios en la mano, para sustituir las piezas adaptadas al gas natural. Seg¨²n An¨ªbal Ruiz, ¨²nicamente habr¨¢ que sustituir, en la mayor¨ªa de los casos, los chicl¨¦s o inyectores de calentadores y cocinas.
En un par de semanas, el gas natural llegar¨¢ a los barrios que recorren la carretera de Andaluc¨ªa. El centro de la ciudad queda para el final. All¨ª har¨¢ falta realizar unas peque?as obras para incorporar unas llaves de aislamiento a la red general.
Ruiz afirm¨® que la compa?¨ªa espera causar "trastornos m¨ªnimos" en el funcionamiento de la ciudad. "No vamos a poner Madrid patas arriba; esta experiencia se ha realizado sin problemas importantes en varias capitales europeas".
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