GENTE

Miguel ?ngel Chastang, contrabajista madrile?o de 35 a?os, ha obtenido una beca Fullbright que le permite estudiar en el City College de Nueva York como alumno privilegiado del c¨¦lebre Ron Carter. Chastang lleva viviendo en Nueva York -precisamente en el coraz¨®n de Harlem- desde agosto de 1986, y todav¨ªa se siente fascinado por la ciudad: "Lo mejor de Nueva York", asegura, "es llegar y ver que hay montones de personas que son mejor que t¨²; ¨¦sa es una buena forma para superarse. Y luego, todo el mundo lo dice, lo importante de Nueva York es la energ¨ªa flotante que hay en el aire. S¨®lo tienes que andar por la calle para sentir un ritmo especial, que los europeos no tenemos". Afirma tambi¨¦n este contrabajista que en Harlem "no existe el misterio de qu¨¦ es el jazz. S¨®lo tratamos de saber qu¨¦ es, c¨®mo se toca. No hay tiempo para averiguar. Est¨¢ all¨ª". Chastang abandon¨® los estudios de arquitectura para seguir el camino de la m¨²sica hasta llegar a la dedicaci¨®n exclusiva al jazz, aunque antes tuvo que ganarse la vida trabajando con autores muy diversos: Guerrero, Serna, Andi¨®n, Pastor, Miguel R¨ªos, Manolo Sanl¨²car y la misma Lola Flores. Su bajo el¨¦ctrico suena en Los viejos rockeros nunca mueren, el ¨¦xito de Miguel R¨ªos. En 1980 opt¨® por s¨®lo jazz, se consolid¨® como instrumentista y grab¨® dos elep¨¦s. Ahora, en Nueva York, su maestro, Ron Carter, le encarga trabajos y ¨¦l asegura que ha aprendido m¨¢s en este a?o que en los 10 anteriores, por lo que se siente "preparado para tocar con quien sea. Estar¨ªa muerto de miedo, pero lo har¨ªa".