Verse como otro

J. A. Seg¨²n Chass Llach, la virtud principal del maquillador es la observaci¨®n, unida a una buena labor de investigaci¨®n. "Hay que mantener una observaci¨®n constante, estudiar al actor, verle en escena. Una vez planificado lo que vamos a hacer, a nivel te¨®rico (y aqu¨ª hay que estudiar mucho, la ¨¦poca, las costumbres), me paso d¨ªas en los ensayos tomando nota de c¨®mo usa las manos, c¨®mo crea las emociones para, a mi vez crear un maquillaje para ¨¦l".

"Lo m¨¢s dif¨ªcil para el actor", contin¨²a, "es llegar a verse a s¨ª mismo en el f¨ªsico de otra persona. El maquillaje le ayuda a crear mejor el personaje; ¨¦l pondr¨¢ el alma del personaje, se transformar¨¢ en parte fisicamente, pero necesita una ayuda exterior. Hay que discutir con ¨¦l, y es un proceso muy ¨ªntimo, hay que escuchar sus opiniones, sus problemas, sus sugerencias".

El especialista trabaja con un material muy nuevo, preferentemente de origen alem¨¢n, parte del cual se ha creado poco a poco a base del feed-back de las empresas productoras con los mejores t¨¦cnicos.

"El maquillaje ha cambiado completamente, y lo ha hecho siguiendo a la iluminaci¨®n, de la que es inseparable. Hay que trabajar siempre en relaci¨®n con la luz, saber qu¨¦ tipo de filtros se van a emplear en cada escena. Los maquillajes de hoy son muy transl¨²cidos, permiten crear multitud de efectos y colores".