Los mercados apenas tienen fuerza
Los mercados de valores contin¨²an sin encontrar una soluci¨®n a sus problemas, hasta ahora olvidados a un lado en tanto se resuelve la pugna abierta por el control de Banesto. Los habituales nunca agradecer¨¢n bastante el que, en momentos como ¨¦ste, se les haya proporcionado un tema candente sobre el que opinar, pues los corros apenas merecen m¨¢s comentario que el de las escasas operaciones cruzadas en cada uno de ellos. El mercado contin¨²a dividido, tanto en lo que se refiere a la evoluci¨®n de los precios como a la contrataci¨®n, en dos grandes bloques, con un sector bancario en el que las apuestas pierden parte de su fuerza, pero que, a falta de cualquier cosa mejor, acapara toda la atenci¨®n.La jornada no comenzaba con buen pie, ya que los valores el¨¦ctricos y los de automoci¨®n no consegu¨ªan mejorar sus posiciones de forma clara, aunque alg¨²n peso pesado hizo valer su ponderaci¨®n para evitar la baja del sector. El dinero vuelve a ser el gran ausente en los corros, incluso en aquellos en los que se deja sentir cierto ambiente comprador. En estos casos, s¨®lo los que pretenden vender cantidades que superan los 1.000 t¨ªtulos saben de los problemas que se pueden encontrar, pues el comprador los toma en peque?as porciones, a no ser que se quiera variar la cotizaci¨®n m¨¢s all¨¢ del 10%.
Dentro del sector bancario no existen estos problemas, pues el dinero m¨¢s especulativo se ha dirigido hacia los valores que pueden ser objeto de compra, es decir, hacia aquellos que pueden proporcionar una plusval¨ªa adicional a corto plazo. Tambi¨¦n hay quien juega con la vista puesta en plazos m¨¢s reducidos y prefiere las plusval¨ªas que se han prodigado en el sector a lo largo de la ¨²ltima semana. La oferta que hab¨ªa ayer fuera de hora para algunos de estos valores anul¨® sobradamente los saldos compradores, lo que plantea alg¨²n problema para hoy.
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