La ¨²nica iglesia mud¨¦jar de Madrid est¨¢ ocupada por viviendas y oficinas
La ¨²nica iglesia de estilo mud¨¦jar de Madrid, la ermita de Santa Mar¨ªa la Antigua, se encuentra en un alarmante estado de abandono y deterioro, a pesar de que el Ministerio de Cultura la declar¨® monumento hist¨®rico-art¨ªstico en el a?o 1981. Ubicada en el distrito de Carabanchel, a escasos metros de la c¨¢rcel, hace las veces de capilla del cementerio parroquial. Seis construcciones, viviendas, oficinas y retretes, levantados en el interior y en el exterior, han transformado su estructura y aspecto originales.
El p¨¢rroco Manuel D¨ªaz Soto se dirigi¨® el pasado 1 de diciembre a la Consejer¨ªa de Cultura de la Comunidad, respaldado por un grupo de feligreses, para pedir la urgente restauraci¨®n de la ermita. Santa Mar¨ªa la Antigua, construida en ladrillo y mamposter¨ªa de granito en la baja Edad Media, entre los siglos XIII y XV, cuenta con importantes elementos arquitect¨®nicos del mud¨¦jar toledano y castellano-leon¨¦s, reunidos en una misma edificaci¨®n rural.Chabolas y cobertizos de madera, una torre met¨¢lica de alta tensi¨®n y un aparcamiento, utilizado para el lavado de veh¨ªculos, ocupan el barrizal situado frente a la fachada principal de la ermita. Seis construcciones realizadas en el interior y en el exterior han transformado su estructura y aspecto original hasta extremos inimaginables en otros monumentos de similar importancia.
La m¨¢s antigua es una caseta adosada al ¨¢bside, quiz¨¢ en el siglo XVII, que fue sacrist¨ªa de la capilla, aunque hoy permanece desocupada y sin uso concreto. Unos modernos retretes, a los que se accede por el cementerio, y un alineamiento de nichos del siglo XIX se incrustan tambi¨¦n en el muro del ¨¢bside, ocult¨¢ndolo de la vista en sus tres cuartas partes. Asimismo, la nave est¨¢ tabicada por una vivienda y la oficina del cementerio.
La torre soporta por el exterior la carga de una vivienda m¨¢s que pudiera ocultar otra posible puerta de entrada a la ermita. El ladrillo y el granito de toda la fachada, excepto la portada, est¨¢n cubiertos con una capa de cal, y toda la nave, incluidos los arcos, con otra de yeso y pintura. En los seis a?os transcurridos desde la declaraci¨®n de Santa Mar¨ªa la Antigua como monumento hist¨®rico-art¨ªstico la Administraci¨®n p¨²blica no ha efectuado reparaci¨®n alguna en la ermita, aunque tal declaraci¨®n implica que deber¨ªa estar sometida a vigilancia y protecci¨®n.
Tampoco el arzobispado de Madrid, propietario del monumento, ha subsanado los desperfectos, si bien en su d¨ªa reconoci¨® los m¨¦ritos y el valor art¨ªstico del edificio en un informe de la Academia de Arte e Historia San D¨¢maso.
El p¨¢rroco no ha pensado todav¨ªa d¨®nde instalar¨¢ las dependencias del cementerio si la Consejer¨ªa de Cultura decide finalmente la restauraci¨®n, pero conf¨ªa que el problema lo resuelva el arzobispado.
Degradaci¨®n del entorno
Por su parte, el concejal de la Junta Municipal de Carabanchel, Joaqu¨ªn Garc¨ªa Ponte, ha declarado que est¨¢ dispuesto "a hacer lo que haga falta" para salvar la ermita. El Ayuntamiento, no obstante, ha consentido desde 1981 la degradaci¨®n del entorno, una zona por la que transitan s¨®lo los visitantes del cementerio y de la c¨¢rcel.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.