El futbolista que corri¨® con un bal¨®n entre las manos

Algunos datos contradicen la supuesta historia. Pero la mayor¨ªa apunta a un personaje, William Webb Ellis, y a una ciudad, Rugby, situada al noroeste de Londres, en el mismo centro de Inglaterra, del imaginario tri¨¢ngulo geogr¨¢fico que forman Leicester, Northampton y Coventry. Y a un d¨ªa brumoso, habitual? en noviembre de 1823. El escenario era el campo de f¨²tbol de la Public School, donde todav¨ªa hoy se conmemora con una placa de m¨¢rmol rosa el hecho diferencial de un deporte, el rugby, que gracias a un estudiante pelirrojo y desgarbado, aunque atl¨¦tico, se desgajaba del padre f¨²tbol. Ellis, durante el encuentro, de forma inesperada, cogi¨® la pelota con las manos y corri¨® hacia la porter¨ªa contraria.Parec¨ªa una ¨¦poca apropiada para romper los moldes tradicionales. La corona brit¨¢nica sufr¨ªa el desprestigio de los continuos esc¨¢ndalos matrimoniales de Jorge IV y el deporte no iba a estar al margen de la heterodoxia. Curiosamente, el rugby nac¨ªa como contestaci¨®n revolucionaria al f¨²tbol, pero se convertir¨ªa con el paso de los a?os en la modalidad m¨¢s tradicional. Aun ahora, con peque?os pasos al compararlo con el resto de deportes, da grandes zancadas para sus costumbres casi ancestrales.

La celebraci¨®n de la 1 Copa del Mundo, la primera cita universal m¨¢s de siglo y medio despu¨¦s de la acci¨®n de Ellis, a cuyo nombre se ha dedicado la copa, ha sido significativa. Ning¨²n gran deporte individual o colectivo ha tenido tanto retraso en el ecumenismo. Casi todos los contactos se hac¨ªan con giras individuales. Otra contradicci¨®n cuando el rugby, en sus reglas y jugadas, fomenta siempre el compa?erismo.

Dudas

La propia duda ha planeado sobre William Webb Ellis y su historia. S¨ª es seguro que se convirti¨® en pastor protestante hasta su muerte en Menton (Francia), en 1872. Pero si el anticuario Matthew Bloxam confirm¨® que hab¨ªa efectuado la famosa acci¨®n en la Public School de Rugby, no parece claro que en 1823 estuviera en el campo de f¨²tbol. Seg¨²n el mismo Bloxam, Ellis ingres¨® en la escuela en 1813 y la abandon¨® en 1820. Incluso un juez de la reina Victoria, Thomas Hughes, se adjudic¨® el puesto de pionero a?os m¨¢s tarde, en el invierno de 1841. Tambi¨¦n se podr¨ªa retroceder en el tiempo y encontrar juegos antiguos de pelota para encontrar antecedentes. Pero Ellis, para la leyenda del deporte, ha sido el gran fundador.