El 'califa rojo'
Julio Anguita se gan¨® el apodo de califa rojo por su dominio absoluto sobre el electorado de C¨®rdoba, progresivamente consolidado desde que el 18 de abril de 1979 accedi¨® a la alcald¨ªa de la ciudad con una mayor¨ªa comunista s¨®lo relativa, pero apoyada por socialistas y andalucistas merced a los pactos municipales. Desde entonces no ha hecho sino crecer pol¨ªticamente. En la siguiente convocatoria municipal, en 1983, logr¨® -pese a que el PSOE desembarc¨® en la campa?a a l¨ªderes como Rafael Escuredo, Enrique Tierno y Alfonso Guerra- la mayor¨ªa absoluta en Cordoba, ¨²nico Ayuntamiento de capital de provincia que gobierna Izquierda Unida.
Cuando el 11 de febrero de 1986 Anguita dej¨® su puesto como alcalde cordob¨¦s para ser el candidato comunista a la presidencia de la Junta de Anlaluc¨ªa se hab¨ªa convertido ya en la obsesi¨®n de los socialistas. Este maestro de escuela de 45 a?os -nacido en Fuengirola (M¨¢laga) en la familia de un modesto brigada-, con su hablar filos¨®fico, pero populista, su aspecto de hombre honrado y su buena presencia f¨ªsica, es, sobre todo, un pol¨ªtico que cae bien a la gente: una encuesta, encargada por el propio Gobierno socialista andaluz en 1984 le calficaba como el pol¨ªtico con m¨¢s aceptaci¨®n de la regi¨®n. Efectivamente, en 1986 el PSOE adelant¨® la elecciones generales haci¨¦ndolas coincidir con las andaluzas, y, a pesar de ello, los que junto al voto socialista para toda Espa?a pusieron la papeleta de Anguita para Monsalves -sede de la presidencia de la Junta de Andaluc¨ªa- se contaron por millares: concretamente unos 400.000 cambiaron de bando.
La fuerza del carisma
El movimiento pol¨ªtico que apoya al l¨ªder andaluz, por otra parte, es anterior y superior al montaje de la Izquierda Unida espa?ola. Se llam¨® primero Convocatoria por Andaluc¨ªa (CA) y ahora agrupa las dos denominaciones. Su fuerza se basa en el carisma personal del l¨ªder y en que no es un proyecto gestado a la rueda de una convocatoria electoral concreta por unos cuantos partidos. Cuando se convocaron las elecciones de 1986 m¨¢s de un centenar de personas llevaban a?o y medio trabajando en un programa de gobierno, que despu¨¦s se ha seguido discutiendo y perfeccionando en innumerables asambleas y reuniones.La cumbre de IU-CA lleg¨® antes de las municipales de 1987, cuando se unieron a la coalici¨®n las candidaturas auspiciadas por el Sindicato de Obreros del Campo, que gobiernan poblaciones de fuerte implantaci¨®n jornalera como Marinaleda (Sevilla). Entonces se pudo decir que pr¨¢cticamente se hab¨ªa agrupado frente al PSOE el resto de la izquierda andaluza.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.