Todo vale para ganar
Clerides advierte a los votantes que Vasiliu es un hombre de paja de los comunistas de Akel, que existe un aut¨¦ntico peligro rojo y que un hombre con esa dependencia no puede traer la unidad al pa¨ªs. La defensa de Vasiliu es, por una parte, su propia persona: ?c¨®mo va a ser un agente comunista un multimillonario hombre de empresa, cuyo ¨¦xito en la vida ha llegado de la mano, de la libertad del sistema econ¨®mico occidental? Promete que no pagar¨¢ ninguna deuda a Akel -"porque no la he contra¨ªdo"-, no sentar¨¢ a ning¨²n comunista en su Gobierno y que su pol¨ªtica diferir¨¢ en puntos sustanciales de la del partido comunista, concretamente, sobre el acercamiento a la Comunidad Eeuropea y el mantenimiento de las dos bases brit¨¢nicas de la isla. Pero Clerides insiste: el objetivo de Vasiliu es entregar el poder al comunismo.Vasiliu, por su parte, ha subrayado algunos aspectos oscuros del pasado de Clerides, como el despido de 850 polic¨ªas cuando fue presidente en ejercicio en 1974, y le ha acusado de que, cuando era negociador con los turcochipriotas, en 1978, y se discut¨ªa un acuerdo, entreg¨® a Denktash la posici¨®n grecochipriota.
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