Cantabria despide con banderas a media asta a las v¨ªctimas del accidente ferroviario

Unas 1.300 personas asistieron ayer, al mediod¨ªa, en la catedral, a los funerales oficiales por los ocho muertos de la cat¨¢strofe ferroviaria de Valladolid, ocurrida en la madrugada del jueves. Diez y siete sacerdotes, entre ellos varios can¨®nigos y otras dignidades eclesi¨¢sticas, acompa?aron al obispo de la di¨®cesis, Juan Antonio del Val, en la celebraci¨®n de la misa de difuntos de Perosi. Las banderas de Cantabria ondearon ayer a media asta.

En lugares preferentes del templo abarrotado por una multitud que hab¨ªa accedido a ¨¦l bajo una intensa lluvia, se hallaban las autoridades regionales y numerosos familiares de las v¨ªctimas; el Ministerio de Obras P¨²blicas estaba representado por el subsecretario, Javier Maule¨®n.

El prelado record¨®, en su homil¨ªa, emocionadamente a los desaparecidos. "En este accidente han muerto", dijo, "hijos nuestros, hijos cercanos por v¨ªnculos de sangre, de amistad o de vecindad. Por eso la solidaridad del pueblo en Cantabria no se ha detenido en ideas sino que ha llegado al coraz¨®n y se manifiesta en uni¨®n c¨¢lida y fraterna con los familiares de quienes perdieron la vida".

En la capilla ardiente establecida en el palacio de la diputaci¨®n regional, cinco f¨¦retros permanecieron durante la noche hasta su conducci¨®n al cementerio; guardaban los restos del consejero de Obras P¨²blicas, F¨¦lix Ducasse, del tambi¨¦n ingeniero y alto cargo del mismo departamento, Vicente Alc¨®n, del l¨ªder ganadero Jos¨¦ Nicanor Pereda, del joven bi¨®logo Javier Bocanegra, y de la estudiante de 20 a?os Carmen L¨®pez Verdeja.

Cuarenta horas despu¨¦s de ocurrida la tragedia, la sociedad c¨¢ntabra contin¨²a conmocionada por el desastre que ha quitado la existencia a ocho de sus miembros; la vida oficial sigue paralizada, las banderas ondean en sus centros a media asta y ayer qued¨® suspendido el pleno de la asamblea regional anunciado para las 17.00 horas. Los dos peri¨®dicos regionales publicaron ayer unas 60 esquelas f¨²nebres, muchas de ellas remitidas por ayuntamientos.

F¨¦lix Ducasse, cuyo apellido de claro origen franc¨¦s proced¨ªa de su abuelo ingeniero que hace varias d¨¦cadas lleg¨® a Extremadura para tender un ferrocarril, hab¨ªa firmado, s¨®lo 15 horas antes de morir, un convenio con el ministro de Obras P¨²blicas para el desarrollo de nuevas medidas de apoyo a la vivienda. Una de sus obsesiones era abordar el saneamiento integral de la bah¨ªa de Santander y acabar con la contaminaci¨®n de la cuenca del r¨ªo Besaya. El impulso de un programa relativo al abastecimiento de aguas formaba parte de su quehacer proyectado hacia el futuro.

El proceso de investigaci¨®n sobre las dos locomotoras comprender¨¢ un exhaustivo estudio de la electrovalvuler¨ªa, la conducci¨®n y los equipamientos.