La sombra de una duda

, El Grupo de Homicidios de la Brigada Central compara los cr¨ªmenes con los rompecabezas. Para armarlos, dicen, hay que encajar bien y suavemente las piezas. El pasado a?o se produjeron 686 muertes violentas en Espa?a entre homicidios y asesinatos; el 14% de estos cr¨ªmenes no se ha resuelto. Las muertes de Paula Mart¨ªnez y de Sagrario Garc¨ªa de Barqu¨ªn, dos de los casos que saltaron a la opini¨®n p¨²blica, todav¨ªa no se han -esclarecido. Los investigadores creen que tuvieron en sus manos a los responsables, pero les falt¨® una prueba para llevarlos ante el juez.

El perro se volv¨ªa loco con aquel bulto. El paquete llevaba unos d¨ªas al lado de la v¨ªa del tren y el hedor que desprend¨ªa era tan insoportable que los vigilantes de la zona industrial de San Fernando de Henares, localidad situada a 17 kil¨®metros de Madrid, tiraron de la manta que lo cubr¨ªa. Oculto entre bolsas de pl¨¢stico encontraron el cuerpo decapitado de una mujer a la que, adem¨¢s, hab¨ªan quemado las yemas de los dedos.El cad¨¢ver se encontr¨® el 19 de agosto, pero la muerte se produjo una semana antes. El estado del cuerpo era deplorable; sin embargo, el asesino no consigui¨® su prop¨®sito: la mujer fue identificada. La Guardia Civil, la primera en hacerse cargo del caso, sab¨ªa que no se enfrentaba a un crimen pasional sino a un asesinato fr¨ªamente ejecutado. Calculado al detalle. "Quien le cort¨® la cabeza deb¨ªa ser un psic¨®pata o alguien muy pr¨®ximo a la v¨ªctima; adem¨¢s deb¨ªa ser una persona fuerte porque la cabeza cay¨® de un solo tajo", asegura uno de los investigadores.

La v¨ªctima, una viuda con tres hijos, ejerc¨ªa la prostituci¨®n en la zona de Capit¨¢n Haya y era adicta a la hero¨ªna. Las prostitutas de la zona sab¨ªan que hab¨ªa vivido durante un tiempo con un hombre. Un chulo que seguramente la macarre¨® durante un tiempo. Era normal, seg¨²n una confidencia recibida por la polic¨ªa, que ella apareciera a altas horas de la madrugada marcada por los golpes.

A partir de ah¨ª la investigaci¨®n se centr¨® en un sospechoso y el grupo de atracos de la Brigada Regional empez¨® tambi¨¦n a colaborar en el esclarecimiento del caso, junto a la 112 -Comandancia de la Guardia Civil. La manta que cubr¨ªa el cad¨¢ver, de un modelo artesana? que se fabrica en Andaluc¨ªa, se mand¨® al laboratorio.

El sospechoso se relacionaba con otra mujer, nacida en un pueblo donde se pensaba se fabricaba el mismo modelo de manta. Ambos se encargaban de cuidar una mansi¨®n, en una zona pr¨®xima a la carretera de Barcelona y en el camino de San Fernando de Henares. Cuando los investigadores llegaron al domicilio los sospechosos ya no trabajaban all¨ª, pero de la finca hab¨ªan desaparecido diversos ¨²tiles de jardiner¨ªa, entre ellos un hacha. En la casa se encontraron tambi¨¦n restos de una hoguera en la que podr¨ªa haberse quemado la cabeza de Paula. Las pistas parec¨ªan buenas, pero la coartada del interrogado tambi¨¦n lo era.

El 11 de noviembre pasado se descubr¨ªa otro cad¨¢ver decapitado y carbonizado. El cuerpo estaba en el interior de una furgoneta, en un descampado de la calle Garc¨ªa Noblejas. Esta vez se trataba de adolescente y ten¨ªa tres cuchilladas en la espalda. Que era virgen y que ten¨ªa 15 a?os es lo ¨²nico que se pudo determinar despu¨¦s de practicarle la autopsia. Siete meses despu¨¦s sigue sin conocerse la identidad de la joven.

La polic¨ªa, sin embargo, no desespera. La pasada semana la Brigada Central de Polic¨ªa Judicial identific¨® el cad¨¢ver de una millonaria mexicana: Mar¨ªa del Sagrario Garc¨ªa de Barqu¨ªn llevaba 10 a?os muerta.

El cuerpo se encontr¨® completamente calcinado y del resultado de la autopsia se supo que la muerta deb¨ªa ser americana. El cad¨¢ver ten¨ªa unas piezas dentales realizadas con una t¨¦cnica que s¨®lo usan los odont¨®logos americanos. entonces fueron interrogados algunos sospechosos -entre ellos una mujer- de haber provocado la muerte de la v¨ªctima. Diez a?os despu¨¦s del crimen, el m¨¦dico que hab¨ªa realizado el puente dental se hab¨ªa muerto, pero el Colegio de Odont¨®logos Mexicanos facilit¨® las radiograf¨ªas del maxilar de Mar¨ªa Sagrario. Correspond¨ªan a la misma persona.

Desempolvar los casos

Los hombres del Grupo de Homicidios de la Brigada Central saben que el tiempo juega en su contra para resolver un homicidio. Ellos se ocupan de desempolvar los casos m¨¢s viejos, los que llevan m¨¢s tiempo en el archivo. Con el tiempo los testimonios de los testigos se sedimentan y el homicida se afirma en su coartada. La principal desventaja del grupo es que no est¨¢n presentes en la inspecci¨®n ocular de los cad¨¢veres.

'Los muertos hablan", dice rotundo uno de los miembros de la brigada, "pero hay que saber interpretar lo que dicen. La escena del crimen permite saber lo que ha podido ocurrir; te ayuda a determinar el m¨®vil y a partir de ah¨ª sabes qu¨¦ camino seguir". Los homicidas m¨¢s f¨¢ciles de descubrir act¨²an por motivos pasionales y los asesionatos m¨¢s complicados son los ajustes de cuentas.

A veces en el curso de un interrogario, los polic¨ªas han tenido la convicci¨®n moral de tener en sus manos al asesino, pero "eso no sirve para nada. Hay que demostrarlo", asegura un funcionario. "No vale siquiera que el acusado se derrumbe y cante". La sombra de una duda mantiene vivas las investigaciones de los casos pendientes.