Una guerra a punto de empezar

"En el mundo de los negocios, la adopci¨®n de posturas por cuestiones viscerales es mala", se?alaba hace pocos d¨ªas el m¨¢ximo responsable de un grupo financiero nacional de gran dinamismo en los ¨²ltimos a?os que, sin embargo, afirmaba que "entend¨ªa perfectamente la reacci¨®n de los Albertos ante el anuncio de fusi¨®n de Banesto y Central". Y ello tiene su importancia, continuaba, "porque no se puede olvidar la capacidad de generaci¨®n de recursos que tiene el grupo Construcciones y Contratas frente a los hipot¨¦ticos adversarios en una pelea que todav¨ªa no ha estallado".

El grupo Construcciones y Contratas, formado por la sociedad del mismo nombre, FOCSA, Portland Valderrivas yel Banco Zaragozano -con,sus respectivas empresas filiales-, gener¨® unos recursos superiores a los 20.000 millones de pesetas en el 87, "lo que proporciona una importante capacidad de maniobra para adquirir acciones del Central o del nuevo banco", se?alaban estas fuentes, mientras que los "conipetidores podr¨ªan haber pr¨¢cticamente agotado dicha posibilidad".

Identificando a los hipot¨¦ticos competidores en las personas de Mario Conde y Juan Abell¨®, estas fuentes afirmaban que la pr¨¢ctica totalidad de lo obtenido por la venta de Antibi¨®ticos a Montedison se hab¨ªa invertido en la propia Montedison -inversi¨®n que, de realizarse, supondr¨ªa la aparici¨®n de elevadas minusval¨ªas por la ca¨ªda de la cotizaci¨®n y por el cambio de la peseta- y en la adquisici¨®n del paquete que permiti¨® el control del Banesto. Ello supone que, en el caso de que se produjera un enfrentamiento radical entre las partes, la capacidad de aguante mayor corresponder¨ªa a los Albertos, que cuentan con un socio en Cartera Central, el grupo KIO, "al que no parecen faltarle recursos de financiaci¨®n".