Descifrado el testamento del hijo del emperador inca Atahualpa

La joven historiadora ecuatoriana Tamara Estupi?¨¢n de Freire, de 33 a?os de edad, que actualmente desempe?a el cargo de directora de Museos del Departamento de Investigaci¨®n Hist¨®rica del Banco Central de Ecuador, acaba de anunciar en Quito el fin de una investigaci¨®n de seis a?os, en los cuales se descifr¨® y transcribi¨® el testamento de uno de los hijos del emperador inca Atahualpa.Esposa del historiador Juan Freire Granizo -que descubri¨® el testamento en 1982 y que es el actual director del Archivo Hist¨®rico Nacional de Ecuador-, la historiadora Estupi?¨¢n ha sacado a la luz uno de los documentos m¨¢s buscados por los investigadores de las antiguas culturas precolombinas.

Ahora no s¨®lo se tiene una referencia directa, quiz¨¢ la ¨²nica, sobre el m¨ªtico emperador inca, sino que tambi¨¦n se ha llegado a descubrir el barrio inque?o en el que vivieron los tres hijos ecuatorianos de Atahualpa: Elauki, Isabel y Carlos. El testamento pertenece al primero, que era el mayor, y que muri¨® con m¨¢s de 60 a?os.

Este documento in¨¦dito, con m¨¢s de 400 a?os, est¨¢ escrito en espa?ol del siglo XVI y lleva la firma de "don Francisco", como se conoc¨ªa a Elauki. Nueve a?os despu¨¦s de trabajar como investigadora del Departamento de Historia del Banco Central de Ecuador y de ser la primera mujer graduada en historia pura en Ecuador, Tamara Estupi?¨¢n de Freire ha conmocionado el ambiente de la investigaci¨®n hist¨®rica dando luz sobre un espacio oscuro de la historia latinoamericana.

"El testamento fue hallado en un libro de protocolos", afirma la investigadora ecuatoriana, "con m¨¢s de 2.000 folios, del notario Gaspar de Aguilar. La letra es muy dif¨ªcil de descifrar, pues es letra procesal encadenada. El testamento est¨¢ en el folio 1.038 vuelta y se encuentra fechado en 1582".

Para Estupi?¨¢n, el testamento es la prueba f¨ªsica que nos acerca m¨¢s a Atahualpa". "S¨®lo nos queda", a?ade, "sus hijos y el testamento de Elauki. Ah¨ª est¨¢ el valor hist¨®rico, pues no tenemos ni la corona ni el manto, nada f¨ªsico, de Atahualpa".