Conversar con Rico

En respuesta al art¨ªculo Conversando con Rico, del se?or Horacio V¨¢zquez Rial.Esto me trae a la memoria una charla con el ex presidente constitucional don Arturo Umberto Illia cuando me coment¨® lo siguiente: "Una vez, el jefe de la casa militar le dijo: `Presidente, ?reprimimos esta manifestaci¨®n?', y don Arturo le contest¨®: 'Si tuvi¨¦ramos que reprimir, tendr¨ªamos que hacerlo

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con las 40 manzanas que rodean la Casa Rosada (lugar donde se encuentran los centros financieros, econ¨®micos y de poder), que son los que van a conspirar para desalojar al Gobierno constitucional".

El se?or Rico forma parte del nacionalismo trasnochado que a¨²n cree que patria es izar la bandera todas las ma?anas y tocar el clar¨ªn. Lamentablemente, es alimentado por algunos sectores civiles y ciertas corporaciones con grandes intereses, ignorando por completo que soberan¨ªa es la educaci¨®n, la calidad de la salud y de la vivienda de un pueblo, y no un n¨²mero de tanques y ca?ones.

Lo que no comparto con el se?or V¨¢zquez Rial es su an¨¢lisis simplista de la actuaci¨®n de la democracia en Argentina.

Nos dice que la ley de Obediencia Debida dej¨® sin base ¨¦tica al Gobierno constitucional. Ahora cont¨¦steme usted: cuando un colectivo delinque, ?cu¨¢l es la forma de juzgar a todos? ?O usted es de los que creen que se puede disolver o crear un ej¨¦rcito por decreto? ?Desconoce adem¨¢s que el presidente Alfons¨ªn, antes de ser elegido, dej¨® constancia de que para juzgar hab¨ªa que establecer girados de responsabilidad? Para eso rem¨ªtase al libro Ahora.

Pero lo que usted no dice es que la democracia ha juzgado y encarcelado a los responsables directos de la violaci¨®n de los derechos humanos (las tres juntas militares), al general Camps, a los se?ores Su¨¢rez Masson, Firmenich, L¨®pez Rega, Mart¨ªnez de Hoz, ?que ha devuelto a las abuelas sus nietos secuestrados! ?Hay alg¨²n antecedente en el mundo as¨ª? Creo que no.

Lo m¨¢s triste y peligroso del an¨¢lisis que realiza es que mezcla a la clase dirigente pol¨ªtica con corrupci¨®n, ¨¦sta es la mejor forma de desprestigiar por elevaci¨®n al sistema. En Argentina hay corrupci¨®n como en cualquier pa¨ªs; la justicia y los poderes de la democracia se encargar¨¢n de erradicarla, de la misma forma que lo est¨¢n haciendo con los grupos de extrema derecha (nacionalistas), que no representan al 1 % del electorado, cuyo ¨²nico idioma es el de la violencia. ?A m¨ª me preocupa m¨¢s el 15% de Le Pen en Francia! ?Le lama la atenci¨®n que los extremos se toquen? El Partido Comunista Argentino y otros trotskistas dialogan con Rico como dialogaron y prestaron su apoyo incondicional al general Videla (vaya descubrimiento).

El pueblo argentino ha conquistado la democracia y est¨¢ dispuesto a defenderla; sabe diferenciar bien a los dirigentes honestos y probos de los prepotentes y exitias (no olvida a Herminio Iglesias y a otros renovados actualmente). Deje al pueblo, cuyo saber soberano raras veces se equivoca, y no haga predicciones electorales a un a?o vista- Jos¨¦ Miguel Bonet.