Sorpresas y decepciones en el primer encuentro del arte sovi¨¦tico con los mercados occidentales

La primera subasta internacional de arte ruso y sovi¨¦tico celebrada en la URS S depar¨® sorpresas, decepciones y trastoc¨® criterios comerciales entre los artistas contempor¨¢neos de la Uni¨®n Sovi¨¦tica que por primera vez, el jueves por la noche, se enfrentaron al mercado occidental de la mano de la casa de subastas brit¨¢nica Sotheby's. Un cl¨¢sico de la vanguardia sovi¨¦tica, Aleksandr Rodebenko (1891-1956), bati¨® su r¨¦cord mundial cuando. el ¨®leo L¨ªnea, de 1920, fue adjudicado por 330.000 libras esterlinas (casi 68 millones de pesetas) al coleccionista de arte brit¨¢nico David Juda.

El precio m¨¢s alto conseguido anteriormente por una obra de Rodchenko fue de 132.000 libras esterlinas en una subasta londinense en 1987. Un artista de origen jud¨ªo Grisha Bruskin, de 43 a?os, desbanc¨® a los maestros reconocidos del arte contempor¨¢neo sovi¨¦tico al lograr 220.000 libras esterlinas (m¨¢s de 45 millones de pesetas) por su lienzo L¨¦xico fundamental, pintado en 1986.

Tras una emocionante puja en la que interven¨ªan tambi¨¦n compradores por tel¨¦fono, L¨¦xico fundamental fue adjudicado al coleccionista Mark Sapir, un canadiense de origen hebreo sovi¨¦tico que posee en Toronto una colecci¨®n de arte jud¨ªo. Mark Sapir, que emigr¨® siendo ni?o desde la Rep¨²blica Sovi¨¦tica de Georgia, consideraba a Bruskin como uno de los "grandes artistas del siglo XX", una opini¨®n que no era compartida por algunos expertos en arte contempor¨¢neo asistentes a la subasta.

R¨¦cord mundial

L¨¦xico fundamental, un panel de estampas que combina s¨ªmbolos de la vida sovi¨¦tica contempor¨¢nea -uniformes, retratos de Lenin, estrellas rojas y banderas-, ha batido el r¨¦cord mundial de precio pagado por un artista sovi¨¦tico contempor¨¢neo. Otras obras de Bruskin, algunas de ellas con s¨ªmbolos culturales jud¨ªos, alcanzaron precios comprendidos entre las 32.000 y las 85.000 libras este linas.

"Ha sido totalmente inesperado. No s¨¦ todav¨ªa lo que voy a hacer con el dinero", manifestaba, sin disimular su alegr¨ªa, el triunfador de la velada inmediatamente despu¨¦s de la su basta, gran acontecimiento de la vida art¨ªstica moscovita.

Bruskin, miembro de la Uni¨®n de Artistas de la URS S, es desconocido por el gran p¨²blico sovi¨¦tico. "En la URSS s¨®lo ha habido dos exposicio nes m¨ªas", explicaba, "una en Vilnius (Lituania) y otra en Mosc¨² en 1985, que fue clausu rada cuatro horas despu¨¦s de la inauguraci¨®n". Bruskin expone actualmente en el Kunstmu seum de Berna y ha realizado varias exposiciones en el ex tranjero, incluido EE UU.

La subasta organizada por Sotheby's, cuyo volumen de ventas super¨® los 3,5 millones de d¨®lares, inclu¨ªa 119 obras, de las cuales 19 proceden de 1914 a 1940 y el resto refleja la producci¨®n de una treintena de artistas contempor¨¢neos. En la primera muestra, reunida gra cias a las colecciones privadas de las familias de los artistas, estaban, adem¨¢s de Rodchenko, Nadezhda Udaltsova, Alexandr Drevin, B¨¢rbara Stepanova y Maria Ender.

La muestra contempor¨¢nea es una selecci¨®n realizada por Sotheby's y el Ministerio de Cultura de la URSS tras muchas visitas a los estudios de los pintores, quienes se quedar¨¢n con el 60% del precio de la venta (el 10% en divisas y el 50% en rubios sovi¨¦ticos con una generosa cotizaci¨®n oficial). Un 30% del precio ir¨¢ a parar al Ministerio de Cultura y un 8% a la empresa Sotheby's, tras la cesi¨®n de un 2% al Fondo de Cultura de la URSS, una entidad en cuya junta directiva se encuentra la primera dama sovi¨¦tica, Raisa Gorbachova.

"Ha sido un resultado impresionante, que muestra el desequilibrio entre nuestro concepto de calidad y la demanda del mercado", se?alaba Vitia Missiano, un experto en arte contempor¨¢neo. Efectivamente, algunas de las estrellas de la pintura sovi¨¦tica actual lograron cotizaciones inesperadamente bajas en relaci¨®n a las expectativas y, a otras figuras menos estimadas.

Este fue el caso de llia Kavakov, un admirado maestro conceptualista cuyas cuatro telas a subasta lograron entre 12.000 y 20.000 libras esterlinas. Menos afortunado incluso fue Serguei Shutov, una promesa de 33 a?os cuyo tope estuvo en 6.000 libras esterlinas por un tr¨ªptico. Las subastas han sido organizadas por el Comit¨¦ Municipal de Artes Gr¨¢ficas de Mosc¨², cuya galer¨ªa, Malaia Gruzinskaia, fue durante muchos a?os refugio de pintores que no se ajustaban a los c¨¢nones del realismo socialista.

Estos c¨¢nones fueron abandonados en la pr¨¢ctica hace ahora algo m¨¢s de un a?o, cuando el Ministerio de Cultura cambi¨® su funci¨®n de censor cultural por la de promotor comercial de los artistas contempor¨¢neos, no conformistas, en el extranjero. Algunos de ellos, que expon¨ªan hasta hace poco en apartamentos privados y eran objeto de virulentas cr¨ªticas, tienen fresca la memoria de la exposici¨®n al aire libre que en 1974 fue destrozada por un tractor en el parque de Ismailovo, de Mosc¨².

Un espect¨¢culo art¨ªstico

Varios de los cuadros comprados el jueves ftieron donados a las autoridades sovi¨¦ticas con la intenci¨®n de que formen parte en el futuro de un Museo de Arte Contempor¨¢neo de la URSS, una entidad que no existe a¨²n hoy en el pa¨ªs. El cantante brit¨¢nico Elton John, que pujaba a trav¨¦s de un agente, compr¨® dos obras de los esposos Kopistianski (Igor y Svetlana), disparando su precio hasta las 44.000 libras.

"Esto es un show que no tiene nada que ver con el valor art¨ªstico real", dec¨ªa uno de los artistas participantes en la subasta, cuyas obras hab¨ªan alcanzado precios inferiores a otros de sus colegas menos cotizados con anterioridad.

"Con el tiempo, los criterios se asentar¨¢n", dijo el pintor, preocupado por la prueba del mercado libre sufrida. Los precios barajados dificultan el mercado de arte interior de la URSS, ya que son innacesibles para cualquier ciudadano sovi¨¦tico, con un sueldo medio de 206 rubios y sin posibilidad de obtener divisas.