Mala acogida a 'Luces y sombras', de Jaime Camino
Sobrese¨ªda en Italia la querella contra Scorsese
La pel¨ªcula espa?ola Luces y sombras, dirigida por Jaime Camino, entr¨® con mal pie en la rueda competitiva de la Mostra veneciana. Su primera proyecci¨®n, el viernes, ante cientos de periodistas, prueba de suma importancia, ofreci¨® s¨ªntomas alarmantes. La sala Perla del Casino del Lido estaba casi llena cuando el filme comenz¨® y casi vac¨ªa cuando termin¨®. Por otra parte, ayer se inform¨® del sobreseimiento de la querella interpuesta contra Martin Scorsese por La ¨²ltima tentaci¨®n de Cristo.
El abogado de la Bienal, Alfredo Bianchini, inform¨® que los magistrados de Venecia encargados de dictaminar sobre la demanda criminal interpuesta por el abogado de Mil¨¢n Vittorio Bianchi contra el filme decidieron el sobreseimiento al no encontrar en el filme indicios suficientes del supuesto delito de "vilipendio a la religi¨®n", ni bases jur¨ªdicas para ordenar un secuestro cautelar de la copia que se exhibir¨¢ el d¨ªa 7. Bianchini se mostr¨® contento, y dijo que la decisi¨®n es ".el fruto de un trabajo colectivo inteligente y culto de los jueces".En la proyecci¨®n de Luces y sombras, las docenas de pacientes que resistieron hasta el final en sus butacas reaccionaron, en el mejor de los casos, con un sordo silencio, jalonado por algunos silbidos cansinos y varios conatos de rechifla en momentos solemnes de un filme tan ambicioso como frustrante.
La urgencia de una cr¨®nica de festival obliga a emitir impresiones sumarias, nada agradables para los autores pero tambi¨¦n inh¨®spitas para quien ha de emitirlas. Luces y sombras es un filme paralizado por la impotencia. Quiere desplegar en la pantalla una idea hermosa, dificil y ambiciosa, pero no puede. La intuici¨®n filos¨®fica, pl¨¢stica y dramat¨²rgica desencadenante es magn¨ªfica: penetrar con la c¨¢mara en los enigmas espaciales, temporales, hist¨®ricos y humanos que emanan del misterio, unas veces sombr¨ªo y otras luminoso, depositado en Las meninas de Vel¨¢zquez.
Esta deslumbrante idea ha sido desarrollada, primero, en un libreto tan torpe que bordea los l¨ªmites de la incompetencia, y despu¨¦s, en un esfuerzo de visualizaci¨®n de ese p¨¦simo libreto que no logra, ni en realidad pod¨ªa lograr en ning¨²n caso, elevarlo en busca de un vuelo imaginativo, ya que e.. soporte literario vertebral de las im¨¢genes carece por completo de alas y est¨¢ atrapado por la gravedad de la rutina.
Y la voraz rueda de la Mostra oficial sigue adelante, pero sin ofrecer en los ¨²ltimos d¨ªas nada que destaque por encima de las aportaciones de Theo Angelopoulos y Ermanno Olmi, con Paisaje en la niebla y La leyenda del santo bebedor, respectivamente.
Fuera de concurso, el primer acontecimiento especial que parece haber creado unanimidad fue la muy comercial y divertid¨ªsima pel¨ªcula de Robert Zameckis Qui¨¦n enga?¨® a Roger Rabbit, que ocupa el primer lugar en los paneles de popularidad en Estados Unidos. Otro divertido acontecimiento ha venido tambi¨¦n de Hollywood: ese Good morning, Vietnam, que ya se anuncia en Espa?a.
En la secci¨®n competitiva llam¨® la atenci¨®n el filme de Claude Chabrol Un asunto de mujeres, que describe con dureza la vida provinciana francesa durante la ocupaci¨®n. Narra una historia ver¨ªdica, en la que Chabrol muestra su talento para sacar luz de las tintas negras. La interpreta Isabelle Huppert, esta vez con la ventaja de que su personaje coincide con las peculiaridades de su poco expresivo aparato gestual, lo que le permite convertirse en justa candidata al premio de interpretaci¨®n.
De menor entidad es el filme, s¨®lido y un tanto moroso, Eldorado, de Geza Beremenvi. M¨¢s suelto de ritmo, pero un poco inmaduro formalmente, es el brasile?o dirigido por Rodolfo Branclao Ded¨¦ Mamata. Y en cuerda muy diferente, la comedia negra del norteamericano David Mamet Things change, en la que el vetaran¨ªsimo Don Ameche se empe?a en darnos en la vejez lo ririejor de s¨ª mismo: un delicioso personaje, un limpiabotas metido en un aparatoso tinglado de rnafiosos, tendido entre el lago Tahoe, en California, y el lago Michigan, en Chicago.
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