EE UU desencadena la primera guerra comercial durante la presidencia espa?ola de la CE
La presidencia espa?ola de la CE ya tiene su primera guerra comercial servida. Estados Unidos declar¨® ayer el inevitable inicio de hostilidades al anunciar la imposici¨®n de sanciones comerciales, por valor de 100 millones de d¨®lares, en productos alimenticios europeos, debido a la decisi¨®n inapelable de los doce de prohibir, a partir del 1 de enero, la importaci¨®n de carne norteamericana trata, da con hormonas. Espa?a se ver¨¢ afectada en unos 13 millones de d¨®lares de exportaciones de conservas de tomate y en una cantidad m¨ªnima, 1,4 millones de d¨®lares, en bebidas alcoh¨®licas fermentadas de baja graduaci¨®n.
Tambi¨¦n la carne de vaca, jamones curados -daneses fundamentalmente-, caf¨¦s solubles, zumos de frutas y comida para perros, ser¨¢n penalizados por EE UU con unos aranceles del 100% que duplicar¨¢n los precios al consumo de estas importaciones.El representante especial para el comercio del Gobierno norteamericano, Clayton Yeutter, "lament¨®" ayer la "forzada represalia" de Washington contra la decisi¨®n de Bruselas de prohibir la entrada en la Comunidad de la carne de este pa¨ªs tratada con hormonas para el crecimiento. "A pesar de que la CE asegura que la prohibici¨®n est¨¢ basada en preocupaciones sanitarias, todav¨ªa tiene que presentar pruebas de que la adecuada aplicaci¨®n de hormonas de crecimiento amenaza a la salud humana. En consecuencia, la decisi¨®n de poner en marcha la prohibici¨®n es una pr¨¢ctica comercial injusta".
Ronald Reagan ya hab¨ªa anunciado que la considerar¨ªa como tal y que EE UU adoptar¨ªa represalias por lo que Washington considera una p¨¦rdida injusta de mercado para sus ganaderos. Los doce hab¨ªan decidido ya hacer efectiva la prohibici¨®n a partir de primero de a?o, aunque excluyeron a la carne de vacuno para el consumo de aj¨²rnales dom¨¦sticos.
Yeutter explic¨® ayer, al anunciar la represalia, que "hemos intentado repetidamente llevar este tema al arbitraje de un panel cient¨ªfico, bajo los auspicios del GATT (Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio), pero los europeos han bloqueado nuestros esfuerzos". La CE denunci¨®, el 20 de diciembre, a Estados Unidos ante el GATT. Las autoridades comerciales norteamericartas explicaron que sus cient¨ªficos y expertos de la FAO estiman que el uso de hormonas que proh¨ªbe la CE no es perjudicial para la salud.
Las represalias, que tratan de cubrir lo que EE UU perder¨¢ en exportaciones de carne a la Europa comunitaria, entrar¨¢n en vigor a las 12.01 horas del 1 de enero. Y ser¨¢ Espa?a, que a pwtir de ese momento presidir¨¢ la Comunidad, la responsable de coordinar la respuesta. La reacci¨®n europea, que daba por descontada la represalia,de EE UU, ya est¨¢ preparada y con ella la posibilidad de una guerra comercial entre ambos mercados, que se intercambian anualmente productos por un valor de 150.000 millones de d¨®lares.
Una escalada del conflicto podr¨ªa acarrear la prohibici¨®n total de la entrada de carne europea en EE UU, por valor de 450 millones de d¨®lares anuales. La CE, por su parte, s¨®lo exporta 150 millones de d¨®lares de productos c¨¢rnicos a este pa¨ªs. La represalia de ayer pretende, seg¨²n un funcionario estadounidense, a hacer ver a los europeos "en la que se meten si siguen adelante".
"Guerra de las hormonas"
Detr¨¢s de este preludio de la guerra de las honnonas late una desconfianza m¨¢s amplia de Estados Unidos ante la posible p¨¦rdida de mercados tras la puesta en marcha, en 1992, de la Europa del mercado ¨²nico. Los europeos temen por su parte ser discriminados y perder exportaciones debido al acuerdo de libre comercio entre EE UU y Canad¨¢ que crear¨¢ un mercado ¨²nico en Am¨¦rica del Norte antes del a?o 2000.
Las represalias norteamericanas afectan a exportaciones espa?olas por valor de unos 14,5 millones de d¨®lares, un porcentaje m¨ªnimo sobre unas ventas en este mercado de 2.500 millones de d¨®lares anuales. Italia y la Rep¨²blica Federal de Alemania son los pa¨ªses m¨¢s da?ados por la medida anunciada ayer en Washington que, en contrapartida, convertir¨¢ en prohibitivos para los ciudadanos de este pa¨ªs una serie de productos europeos.
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