Reacciones con retraso
La duplicaci¨®n de las ayudas estructurales de la CE fue la gran baza pol¨ªtica que el presidente Felipe Gonz¨¢lez jug¨® a la hora de aprobar la reforma comunitaria, en febrero de 1988, en la cumbre extraordinaria de Bruselas. La exigencia de duplicar los tres fondos comunitarios (Feder, Fondo Social y FEOGA-Orientaci¨®n) hasta. lograr una financiaci¨®n global de 1,8 billones de pesetas en 1993 fue el argumento clave para aceptar el mercado ¨²nico. Los pa¨ªses m¨¢s pobres de la Comunidad Europea se ver¨¢n perjudicados por la supresi¨®n de barreras comerciales y la invasi¨®n de productos, por eso hac¨ªa falta multiplicar y concentrar los esfuerzos para corregir el retraso en su grado de desarrollo.Aunque en el momento de la negociaci¨®n pol¨ªtica hubo reflejos, a la hora de programar las peticiones parece que se act¨²a con retraso. Espa?a tiene de plazo hasta el 31 de marzo para presentar los programas y, seg¨²n fuentes del Gobierno, "hemos asumido el reto, y tanto Solchaga como Borrell vigilan de cerca este terna". Pero sorprende que pa¨ªses m¨¢s ricos, como la Rep¨²blica Federal de Alemania, el Reino Unido y Francia, que en teor¨ªa poco tienen que rascar, hayan presentado ya "ofertas de sobra para cinco a?os", cuando la Administraci¨®n espa?ola a¨²n est¨¢ por definir objetivos y discute con los Gobiernos aut¨®nomos sobre el posible reparto.
Espa?a recibir¨¢ este a?o unos 200.000 millones de pesetas en ayudas de la CE, que ir¨¢n creciendo hasta llegar a m¨¢s del doble en 1993. El 80% de los fondos ir¨¢ a las regiones m¨¢s desfavorecidas, en las que la financiaci¨®n comunitaria podr¨¢ alcanzar el 75% de la inversi¨®n, y a la regiones en declive, en las que la financiaci¨®n puede llegar al 50%.
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