El 50? aniversario de 'Lo que el viento se llev¨®' se celebra con una copia restaraurada

La nueva copia, totalmente restaurada, de la pel¨ªcula que marc¨® una ¨¦poca en la historia de Hollywood, Lo que el viento se llev¨®, fue presentada esta semana en una noche de gala en el Radio City Music Hall de la Sexta Avenida de Manhattan, una de las pocas salas que conservan una pantalla del tama?o genuino de la ¨¦poca de las grandes superproducciones.En este nuevo estreno, que conmemora el 50? aniversario de su estreno original en 1939, estuvo presente s¨®lo una de las actrices del reparto, Butterfly McQueen, que hizo el papel de Prissy, la sirvienta de color de la gran mansi¨®n de los O'Hara. Junto a ella, Ted Turner, el magnate de la televisi¨®n por cable, que hace unos a?os compr¨® la filmoteca de los estudios MGM y que ha recibido un sinn¨²mero de cr¨ªticas por la colorizaci¨®n de estos archivos para ser emitidos por televisi¨®n.

El caso de Lo que el viento se llev¨® es una especie de obsequio a sus cr¨ªticos y un homenaje a Atlanta, su centro de operaciones. E! trabajo de restauraci¨®n ha devuelto a la cinta su brillo original y ha mejorado considerablemente su banda sonora.

Para su realizaci¨®n han recurrido al negativo original en Teclinicolor, aprobado previamente por el productor, David Seiznick, que acarici¨® la ruina en 1939 por esta producci¨®n de 4.250.000 de d¨®lares.

La inversi¨®n para su reconstrucci¨®n ha superado el cuarto de mill¨®n de d¨®lares al realizar una nueva copia partiendo de los tres negativos en cian, magenta y amarillo que exige el Technicolor. Los proyectores originales recreaban el color a trav¨¦s de un prisma, y a pesar de su perfecci¨®n, las copias posteriores fueron realizadas en soportes de mala calidad que se han deteriorado considerablemente.

Cuadro completo

Los laboratorios de Technicolor cerraron en 1974 y las copias fueron a¨²n inferiores e in¨²tiles, incluida la versi¨®n actual de v¨ªdeo, de la que se espera realizar otra nueva, con bandas negras que permitan mantener el cuadro completo.Pero las superproducciones nunca fueron pensadas para ver en un televisor, y el reestreno de la ¨¦pica gloriosa del cine norteamericano cont¨® con un proyector de 4.500 vatios en la sala del Radio City, donde m¨¢s de 6.000 espectadores gozaron de cuatro horas de pasi¨®n, gloria y fuego benditos por la sonrisa, m¨¢s brillante que nunca, de Clark Gable, la coqueter¨ªa y fuerza de Vivien Leigh y la sonrisa forzada de Olivia de Havilland.

El gusto por el cine espectacular regresa a los ojos so?adores del pueblo norteamericano, y el pr¨®ximo mi¨¦rcoles se reestrenar¨¢ tambi¨¦n Lawrence de Arabia, en una nueva version recompuesta, prolongada y reeditada sin la timidez que los estudios obligaron al personaje de un Peter O'Toole excesivamente enigm¨¢tico para las conciencias de los a?os sesenta, que aceptaron -seg¨²n David Lean- una edici¨®n totalmente diferente del proyecto.