Nehru, Idi Am¨ªn y dem¨¢s seres humanos

J. J. N. A., "Una ley de la historia es que los grandes momentos producen los grandes l¨ªderes y luego, cuando la. vida vuelve a lo cotidiano, aparecen los l¨ªderes pragm¨¢ticos", dice Kapuscinsk' al recordar la larga e impresionante lista de pol¨ªticos, estadistas y dictadores que ha conocido en sus 35 a?os de viaje por las guerras y revoluciones del Tercer Mundo: "S¨ª, conoc¨ª a Nehru, de India, y a Nasser de Egipto, a Sukarno en Indonesia y a Zhou Enlai en China. El primer ministro chino era un hombre de gran cultura y dignidad, al igual que Nehru, que era una gran personalidad y que Nasser, que tambi¨¦n era muy grande, lo mismo que Julius Nyerere de Tanzania".

La humanidad y el profundo conocimiento de los pa¨ªses don de ha estado llevan a Kapuscinski a comprender, en su contexto, a un personaje tan cruel y vili pendiado como Id? Am¨ªn Dada, ex-dictador de Uganda. "Conoc¨ª a Am¨ªn en 1962, cuando ¨¦l era a¨²n un oficial del ej¨¦rcito y Uganda acababa de acceder a la independencia. Recuerdo que yo hab¨ªa contra¨ªdo malaria y lo co noc¨ª mientras visitaba el hospi tal; luego lo v¨ª muchas veces cuando ya era presidente. En Occidente se ha presentado a Am¨ªn como un monstruo, pero en reali dad era muy inteligente; muy pri mitivo, desde luego, y sin mane ras de estadista, lo que ¨¦l utiliza ba en su beneficio. Se manten¨ªa en el poder de un modo muy cruel, pero muy h¨¢bil. Am¨ªn era un animal pol¨ªtico, por instinto. Y fijese que su r¨¦gimen se man tendr¨ªa hasta hoy de no haber sido por la interv - enci¨®n de Tan zania, porque cuando estaba en el poder, Am¨ªn ten¨ªa muy poca oposici¨®n".

La situaci¨®n de miseria y abandono t¨¦cnico y educativo de los pa¨ªses del Tercer Mundo sirve, en opini¨®n de Kapuscinski, para entender la crueldad y escaso progreso aparente de algunas de las revoluciones que ha presenciado, como las de Uganda y Etiop¨ªa. "En Etiop¨ªa", dice, "no es que hayan ido mal las cosas despues de la revoluci¨®n, sino que siempre han estado muy mal. En el mundo hay pa¨ªses tan pobres que la pol¨ªtica del gobierno no cuenta. Para m¨ª, la pol¨ªtica empieza a cierto nivel m¨ªnimo de vida humana; por debajo de ese nivel, no hay pol¨ªtica".