J¨²bilo por los asesinatos

Los presos de ETA recluidos en la c¨¢rcel madrilefia de Alcal¨¢-Meco celebraron durante la madrugada de ayer con risas y gritos el asesinato de dos polic¨ªas que un comando de la organizaci¨®n terrorista hab¨ªa cometido, pocas horas antes, a la entrada de la prisi¨®n. Los reclusos de la banda armada, seg¨²n algunos funcionarios de la prisi¨®n, festejaron los cr¨ªmenes coreando frases como "Viva ETA" o "dos polic¨ªas menos", informa Luz S¨¢nchez Mellado.Por otra parte, el alcalde de Alcal¨¢ de Henares, el socialista Florencio Campos, declar¨® ayer que tras este atentado Ia actitud respetuosa de los alcala¨ªnos hacia los visitantes y familiares de los presos etarras puede cambiar en el futuro".

Seg¨²n estimaciones policiales, el comando de ETA que en la noche del lunes coloc¨® 15 kilos (le amonal en el veh¨ªculo de un funcionario de prisiones carec¨ªa de informaci¨®n previa sobre el objetivo contra el que finalmente atent¨®. El ¨²nico dato con el que contaba el comando era la hora de cambio de turno entre los funcionarios, una informaci¨®n que incluso pod¨ªa haber sido dada por uno de los 79 presos etarras de Alcal¨¢ Meco, informa Juan Jos¨¦ Echevarr¨ªa.

Incluso, el funcionario de prisiones contra el que se atent¨®, Jos¨¦ Luis L¨®pez Montenegro, no est¨¢ adscrito a la c¨¢rcel de Alcal¨¢-Meco propiamente, sino al recinto de j¨®venes, donde, no hay ning¨²n preso etarra.

La ficha de salida del trabajo de L¨®pez Montenegro marca 22.09 horas. Dos minutos antes, el funcionario Jos¨¦ Luis Argenta fichaba su salida. Argenta se dirigi¨® al cruce y vio por el retrovisor a L¨®pez Montenegro, a quien reconoci¨®. Observ¨® tambi¨¦n a la derecha del cruce de la carretera de Alcal¨¢ de Henares un coche al que no prest¨® atenci¨®n y sigui¨® su camino a casa.

En medios policiales se considera que Argenta salv¨® la vida por que L¨®pez Montenegro iba demasiado cerca de ¨¦l. Los terroristas no ten¨ªan definida a la v¨ªctima, tan s¨®lo pretend¨ªan que fuera un funcionario de prisiones y que viajara solo. Eso explica, seg¨²n fuentes policiales, que cuando se alej¨® el veh¨ªculo de Argenta decidieran en menos de un minuto -eran ya las 22.10 horas- la v¨ªctima.

L¨®pez Montenegro -quien se recupera de sus heridas ha declarado que vio un coche en la cuneta y un hombre que le pareci¨® que escond¨ªa algo en la espalda. Al parecer, el terrorista ni siquiera le dio tiempo a parar el coche -un Renault 11, matr¨ªcula SG-7287-D-, sino que lanz¨® una r¨¢faga. De los 27 impactos, dos alcanzaron al funcionario quien huy¨® en coche y luego, cuando este qued¨® inmovilizado, a pie.

Diez minutos m¨¢s tarde, un autob¨²s con 12 polic¨ªas y dos veh¨ªculos particulares con agentes de paisano observaron un veh¨ªculo con las luces encendidas y una puerta abierta. El conductor del autob¨²s aceler¨® instintivamente para parar en seco a una distancia de seguridad. Los agentes bajaron entonces y esgrimieron sus armas, cuando observaron a un hombre que corr¨ªa y que al ver a unas personas armadas, grit¨®: "?No me remat¨¦is? Los polic¨ªas tu-vieron que reducir a L¨®pez Montenegro. Uno de los coches policiales traslad¨® al herido y el otro -con cuatro agentes- se acerc¨® al Renault 11. Tras una inspecci¨®n ocular, el oficial Pedro Fuente y el agente Gabriel S¨¢nchez-Rico dieron unos pasos dirigi¨¦ndose a su veh¨ªculo para informar de los hechos. Fue el momento de la explosi¨®n. -Los agentes Jos¨¦ Montes y Juan Antonio Garc¨ªa murieron en el acto. S¨¢nchez-Rico tiene graves heridas y Fuente ha sido ya dado de alta.

Los terroristas colocaron la carga en los diez minutos que mediaron y la hicieron explotar con un temporizador. El juez Baltasar Garz¨®n dirige la investigaci¨®n.

Altos cargos policiales y numeroso p¨²blico visitaron ayer la capilla ardiente de los dos polic¨ªas asesinados, cuyo funeral se oficiar¨¢ hoy.