El v¨ªdeo indiscreto
40 mujeres denuncian al due?o de un 'pub' por ocultar una c¨¢mara en el lavabo
, "?Pero qu¨¦ es lo que se ve en la cinta, qu¨¦ hac¨ªan con ella?", le preguntan insistentemente a Mar¨ªa Dolores, una joven de J¨¦rica de 18 a?os que sin saber c¨®mo se ha convertido en protagonista de un filme clandestino rodado en el aseo de se?oras de un pub de este peque?o pueblo de Castell¨®n. La c¨¢mara oculta fue descubierta por una joven. Las 40 chicas que aparecen en la cinta presentar¨¢n otras tantas denuncias y una querella criminal contra el propietario.
La joven responde de forma algo confusa y desordenada: "Pues se ve lo que se ve cuando alguien va a un lavabo", dice titubeando. "Bueno, y a dos chicos que estaban esnifando coca¨ªna". Mar¨ªa Dolores es una de las afectadas por la instalaci¨®n clandestina de una c¨¢mara de v¨ªdeo en el aseo de se?oras del pub Jocri, situado en este pueblo de Castell¨®n.Como en todos los municipios peque?os (J¨¦rica apenas tiene 1.500 habitantes), el boca a boca resulta el medio de comunicaci¨®n m¨¢s efectivo. Tambi¨¦n se acostumbra aumentar con algo de imaginaci¨®n propia lo que se termina de escuchar al vecino. Hasta el extremo de afirmar que la cinta recoge escenas de lesbianismo. "Eso no es cierto", a?ade tajante Mar¨ªa Dolores.
El pasado d¨ªa 3 de junio, pocas horas despu¨¦s de que V¨ªctor, un joven de 15 a?os, entrara en el lavabo de se?oras del pub Jocri, arrancara la c¨¢mara oculta y la llevara a la Guardia Civil, en el pueblo ya se sab¨ªa que la hija de Evaristo aparece en la cinta. Y la de Sergio, el de la tienda, y la de Saturnino. As¨ª, hasta cerca de 40 j¨®venes que, por una suerte que todav¨ªa no logra entender nadie, se han convertido en las actrices principales de un v¨ªdeo muy particular rodado con una c¨¢mara oculta y cuyo destino se desconoce.
El hallazgo fue casual: por las gafas de la novia de V¨ªctor. Cuando la joven entr¨® en el lavabo, un reflejo extra?o en un cristal la puso sobre alerta. La reacci¨®n del muchacho no se hizo esperar: entr¨® y cogi¨® el aparato. El pasado lunes. V¨ªctor reconoci¨® que desde hac¨ªa varios meses sospechaba algo. Sin embargo, no pudo precisar qu¨¦. Una vaga intuici¨®n de que algo ocurr¨ªa en el local y que ha desembocado en una historia que ha sacudido a este pueblo, en la comarca del Alto Palancia, en el interior de Castell¨®n.
Evitar destrozos
El ¨²ltimo s¨¢bado por la noche, alrededor de 400 personas, de J¨¦rica y de otros pueblos, porque el citado pub sirve de punto de encuentro de los j¨®venes de la zona, desfilaron por la avenida en la que se ubica el local y se manifestaron para protestar por el suceso delante de la puerta.
El propietario, Jes¨²s Antonio Huerta, de 33 a?os, que cumple condena en r¨¦gimen abierto en el centro penitenciario de Castell¨®n por atraco con rehenes, se dirigi¨® a la multitud, seg¨²n relataron algunos de los que se encontraban presentes, y dijo que hab¨ªa instalado la c¨¢mara porque quer¨ªa averiguar qui¨¦n romp¨ªa los aseos.
Esta opini¨®n fue corroborada por su compa?era, Elena, quien asegur¨¦ a este diario que el objetivo consist¨ªa en evitar los destrozos que se producen en el recinto los fines de semana.
S¨®lo que se conoce con exactitud que la cinta tiene una duraci¨®n de cuatro horas, depositada en el Juzgado de Instrucci¨®n de Segorbe (Castell¨®n), y que todas las afectadas presentar¨¢n una denuncia en los pr¨®ximos d¨ªas, seg¨²n confirm¨® ayer su abogado, Antonio Mar¨ªn. El letrado confirm¨® tambi¨¦n que presentar¨¢ una querella criminal contra el due?o del local.
Mientras tanto, la gente no deja de hacerse preguntas: "?Qui¨¦n sale?, ?Qu¨¦ hac¨ªan con las pel¨ªculas?. ?Habr¨ªa m¨¢s cintas?. ?Qui¨¦n las ha visto?". Inc¨®gnitas que se despejar¨¢n a ra¨ªz del expediente judicial que se ha abierto sobre el caso.
Pero para las j¨®venes, tales interrogantes revisten poca importancia. Tienen muy claro que han violado su intimidad personal y s¨®lo esperan, seg¨²n Manuela, representante de la Asociaci¨®n de Mujeres, "que la ley castigue al culpable y que no vuelva al pueblo nunca m¨¢s".
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