El fiscal pide 12 a?os para el polic¨ªa que mat¨® a un joven esposado en Alcal¨¢

El ministerio fiscal y el abogado de la acusaci¨®n particular, Fernando Salas, coincidieron ayer en calificar como homicidio la muerte del joven de 26 a?os Felipe Dom¨ªnguez producida por un disparo de pistola efectuado por el agente del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa Adolfo Palenciano. Los hechos sucedieron el 16 de junio de 1987 en Alcal¨¢ de Henares. Ayer se celebr¨® la ¨²ltima sesi¨®n del juicio en la Sala Cuarta de la Audiencia Provincial de Madrid. El abogado del Estado y la defensa pidieron la absoluci¨®n del acusado. El juicio qued¨® visto para sentencia.El ministerio fiscal solicita una pena de 12 a?os y un d¨ªa, y ocho millones de pesetas de indemnizaci¨®n a los familiares de la v¨ªctima. La acusaci¨®n particular, que suma al delito de homicidio las agravantes de abuso de superioridad y uso de medios desproporcionados, pide 17 a?os y 15 millones de indemnizaci¨®n. Fernando Salas, al elevar sus conclusiones a definitivas, argument¨® que el agente Adolfo Palenciano persigui¨® con un arma en la mano -que se disparaba con gran facilidad- a un joven con las manos esposadas a la espalda, debilitado tras dos d¨ªas sin comer y con el a?adido de estar sufriendo el s¨ªndrome de abstinencia. El propio agente reconoci¨® durante el juicio que en ning¨²n momento hab¨ªa tenido la sensaci¨®n de que el perseguido pudiera ser peligroso. El agente no puso el seguro al arma ni la guard¨® en la cartuchera cuando ya estaba seguro de que la v¨ªctima no ten¨ªa escapatoria. Fue el agente quien coloc¨® la pistola a la altura de la cabeza del joven, y no al rev¨¦s. El agente asumi¨® el riesgo de usar medios desproporcionados, por lo que no se puede hablar de disparo fortuito, concluy¨® la acusaci¨®n particular.

El defensor, Juan Carlos Fern¨¢ndez, insiti¨® en que el agente s¨®lo hizo dos disparos al aire al principio de la persecuci¨®n, cuando el fugado estaba lejos, y que no volvi¨® a disparar. No es exigible a un polic¨ªa poner el seguro del arma en una persecuci¨®n a la carrera. El disparo mortal se produjo, adujo el defensor, cuando la v¨ªctima se par¨® en seco, provoc¨® el choque y la pistola se dispar¨® accidentalmente, por lo que pidi¨® la absoluci¨®n.