Los liberales japoneses luchan por evitar en las elecciones de ma?ana su primera derrota
Los resultados del domingo es previsible que desemboquen en una nueva crisis de Gobierno y en la disoluci¨®n anticipada de la actual legislatura a corto plazo. El primer ministro, Sosuke Uno, ha dicho, sin embargo, que entre sus prioridades actuales no est¨¢ la de dimitir y que desea continuar en el cargo hasta el congreso del partido, el pr¨®ximo octubre. Algunas destacadas figuras liberales han manifestado que el jefe del Gobierno tendr¨¢ que presentar la dimisi¨®n si el tropiezo electoral es muy grave.El actual equipo, sin embargo, puede mantenerse en el poder gracias a la mayor¨ªa que mantiene en la C¨¢mara baja, que no se renueva ma?ana.
Dos sondeos difundidos ayer por dos diarios nacionales apuntan a que el partido en el poder perder¨¢ al menos la mitad de los 69 esca?os que pone en juego en los comicios y, por consiguiente su fuerza num¨¦rica quedar¨¢ por debajo de los 127 esca?os que suponen la mayor¨ªa absoluta en una C¨¢mara formada por 252 parlamentarios. Los liberales cuentan en estos momentos con 142 esca?os.
El partido socialista, la primera fuerza de la oposici¨®n, ser¨¢, seg¨²n estas encuestas, el principal beneficiario de la derrota de su rival y conseguir¨¢ doblar los 43 esca?os que tiene en esa C¨¢mara.
El primer ministro est¨¢ completamente desprestigiado a ra¨ªz de las revelaciones period¨ªsticas sobre sus devaneos sexuales. La popularidad del actual Gabinete es de s¨®lo un 12,9%, seg¨²n la ¨²ltima encuesta de opini¨®n, un porcentaje incre¨ªblemente bajo para un Gobierno que no tiene siquiera dos meses de vida y que se cre¨® para limpiar el prestigio del Gobierno tras el caso Recruit, que termin¨® por obligar a dimitir al primer ministro Noboru Takeshita.
Muchos candidatos liberales pidieron a Uno que no hiciera campa?a para no perjudicar m¨¢s todav¨ªa sus escasas posibilidades de triunfo. La cumbre de Par¨ªs fue un buen pretexto para tenerle apartado de los m¨ªtines, pero a su regreso ha insistido en participar en diversos actos electorales en los que no han faltado voces de protesta por parte de algunos asistentes, sobre todo mujeres Chiyo Uno, la esposa del primer ministro, se disculp¨® el pasado mi¨¦rcoles ante un auditorio de m¨¢s de 6.000 mujeres por las controversias suscitadas por la conducta sexual de su marido.
Crisis de credibilidad
Las juergas femeninas de Sosuke Uno no son de todos modos la raz¨®n principal de la previsible derrota del partido en los comicios del pr¨®ximo domingo. Los liberales est¨¢n sumergidos en una grav¨ªsima crisis de credibilidad despu¨¦s de que el caso Recruit forzara esta primavera la ca¨ªda del Gobierno de Noboru Takeshita y dejara en situaci¨®n de jubilaci¨®n temporal a toda la plana mayor del partido por su implicaci¨®n en el famoso esc¨¢ndalo de la compraventa de acciones.Por otra parte, Uno ha tenido que asumir la herencia de dos medidas posiblemente acertadas del anterior Gabinete, pero que han encolerizado a sectores que tradicionalmente han respaldado desde siempre a los liberales: la reforma fiscal, en vigor desde el pasado 1 de abril, que ha introducido un molesto impuesto al consumo del 3%, y la liberalizaci¨®n de las importaciones de algunos productos agr¨ªcolas debido a las presiones norteamericanas para corregir el desequilibrio de la balanza comercial.
En un par de gestos electoralistas, Uno ha declarado esta semana que el Gobierno revisar¨¢ la aplicaci¨®n del pol¨¦mico impuesto y que se opondr¨¢ a la liberalizaci¨®n del mercado de arroz.
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