La ultraderecha arrincona a sus I¨ªderes hist¨®ricos, pero no controla los grupos violentos
J¨®venes dirigentes se han hecho con el mando en las principales organizaciones legalizadas de extrema derecha a trav¨¦s de un proceso que culmin¨® en noviembre pasado con el arrinconamiento de los l¨ªderes hist¨®ricos del sector. El triunfo de Jean-Marie Le Pen en las elecciones francesas obra a favor de esa corriente, que pretende una acci¨®n pol¨ªtico-electoral capaz de superar los fracasos del pasado, abandonando actitudes violentas y las parafernalias dedicadas a la exaltaci¨®n del jefe. Sin embargo, las bases radicalizadas y ciertas estructuras semiclandestinas se resisten al giro y optan decididamente por una acci¨®n directa contra el sistema democr¨¢tico.
Los cambios han sido amplios. Esteban G¨®mez Rovira, de 51 a?os, ya no dirige las Juntas Espa?olas: desde hace menos de un mes se ha hecho cargo de las mismas Ram¨®n Graells, un abogado de 37 a?os. Blas Pi?ar manda todav¨ªa en el Frente Nacional, a sus 71 a?os, pero se ocupa ahora de organizar la sucesi¨®n y para ello cuenta con un nuevo n¨²mero dos, Miguel Bernad, de 47. Y Jorge Mota, dirigente hist¨®rico de Cedade, ha perdido tambi¨¦n la batalla interna.Blas Pi?ar vive horas bajas. Los grupos violentos no reconocen su autoridad, y su reaparici¨®n en la escena pol¨ªtica ha arrojado magros resultados: s¨®lo 60.000 votos este a?o, frente a los 379.000 logrados en 1979. El desastre contrasta con el ¨¦xito de sus socios europeos: Jean-Marie Le Pen, l¨ªder del Frente Nacional de Francia, alcanz¨® el 12% de los votos y 10 esca?os en las elecciones al Parlamento de Estrasburgo, mientras el Partido Republicano de la RFA se hac¨ªa con el 7% y seis actas de diputados.
Pi?ar ha aceptado, al parecer, las sugerencias de los partidos representados en el grupo de Derechas Europeas del Parlamento de Estrasburgo. El m¨¢s cl¨¢sico de los dirigentes ultras ha iniciado "un per¨ªodo de formaci¨®n de j¨®venes cuadros" para preparar la sucesi¨®n. El nombramiento del nuevo secretario general del Frente Nacional, Miguel Bernad Rem¨®n, es una prirricra consecuencia directa de esta operaci¨®n de relevo.
A ra¨ªz de una visita de Le Pen a Madrid, el Frente Nacional se comprometi¨® a fusionarse con las Juntas Espa?olas, la otra estructura legal de extrema derecha creada desde el diario El Alc¨¢zar en 1984. El compromiso de fusi¨®n qued¨® plasmado en un documento, que fue firmado el pasado 14 de abril y vence el pr¨®ximo d¨ªa 31.
Los aparatos de uno y otro partido han debatido ampliamente la reorganizaci¨®n. El 11 de noviembre, las Juntas Espa?olas celebraron un congreso, que ha sido calificado por sus dirigentes como "una verdadera refundaci¨®n". Siete d¨ªas m¨¢s tarde, el Frente Nacional realiz¨® una reuni¨®n, oficialmente considerada su IV Congreso, en el que fue refrendada la nueva pol¨ªtica.
Mientras el Frente Nacional colocaba a Miguel Bernad como nuevo secretario general, las Juntas Espa?olas designaban un nuevo equipo, presidido por el abogado catal¨¢n Ram¨®n Graells, para hacerse cargo de la gesti¨®n de este partido, que dice contar con 5.000 afiliados.
Las Juntas Espa?olas han revisado su postura frente a la Constituci¨®n, cuya validez aceptan ahora. "La Constituci¨®n y la democracia son hechos irreversibles", asegura su nuevo presidente, que va m¨¢s all¨¢ y opina que hay que acabar con la idea de fuerzas nacionales surgida en 1935, en v¨ªsperas de la guerra civil.
Se modera el lenguaje, se renuevan los s¨ªmbolos y se cambia de estrategia. Aceptan la libertad de religi¨®n, pero piden la reinstauraci¨®n de la pena de muerte para los terroristas -¨¦sta fue una las grandes batallas pol¨ªticas utilizadas por los seguidores de Jean-Marie Le Pen en Francia, antes de centrarse en la lucha contra los inmigrantes- y la derogaci¨®n de la ley del aborto. Junto a estos puntos propugnan la salida de Espa?a de la OTAN, al menos mientras el Reino Unido no devuelva a Espa?a la soberan¨ªa sobre Gibraltar.
La persona de Blas Pi?ar es el principal escollo en el proceso de fusi¨®n. Para los representantes de las Juntas, el presidente del Frente Nacional goza de excesivo protagonismo y vive anclado en posiciones inmovilistas que hacen dificil el cambio de rumbo.
Radicalizaci¨®n
Un grupo juvenil -Acci¨®n Universitaria- y unas bases radicalizadas se oponen al giro. Un ejemplo: con el nombre de Juntas Nacionales, esas bases radicalizadas firmaron en Barcelona pintadas de apoyo al atentado de Madrid contra los parlamentarios de Herri Batasuna. El texto de esas pintadas -"ojo por ojo, diente por diente"- iba acompa?ado de la cruz c¨¦ltica.
Mientras, los dirigentes condenan la violencia y tampoco est¨¢n de acuerdo con Bases Aut¨®nomas y otros grupos de acci¨®n directa, que funcionan en universidades y ense?anzas medias.
"Los factores que mueven hoy a la extrema derecha son la corrupci¨®n del proceso electoral y la reacci¨®n que produce, entre familiares y compa?eros de las v¨ªctimas del terrorismo, la entrada de un presunto miembro de ETA en el Parlamento". Esta observaci¨®n es del constitucionalista Jorge de Esteban, quien, tras cinco a?os al frente de la Embajada de Espa?a en Roma, asiste ahora al rebrote ultraderechista desde la Universidad Complutense.
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