Marcucci: "La televisi¨®n por sat¨¦lite no distingue entre el Este y el Oeste"
La presidenta de Super Channel celebra en la RDA la cobertura de 20 millones de hogares
Marialina Marcucci, presidenta del canal brit¨¢nico de televisi¨®n por sat¨¦lite Super Channel, acaba de decir en Berl¨ªn Este que la televisi¨®n por sat¨¦lite hace tiempo que no distingue entre audiencia occidental y oriental. Ha hecho esta declaraci¨®n con motivo de la cobertura de 20 millones de hogares que ha alcanzado este canal justamente en el seno de una familia de Dresde (RDA).
"Para llegar a esta cifra nos ha ayudado la m¨²sica y el deporte, lenguajes universales que juegan una de las principales bazas de nuestra programaci¨®n", ha se?alado Marcucci mientras celebraba que en una zona del Este, "que ahora es actualidad e historia al mismo tiempo, podamos encontrar un marcado inter¨¦s por la televisi¨®n transnacional".Cerca de 50 canales de televisi¨®n por sat¨¦lite pueden recibirse en Europa en estos momentos. La mayor parte de ellos son privados, emiten de forma no codificada, pretenden vivir de la publicidad y son deficitarios. Seg¨²n los ¨²ltimos estudios internacionales de audiencia, unos ocho millones de europeos ven la televisi¨®n por sat¨¦lite o por cable al d¨ªa.
Audiencia europea
Super Channel, que puede recibirse libremente en 22 pa¨ªses europeos a trav¨¦s del sat¨¦lite Eutelsat 1F4, y sobre todo, por medio del 90% de los operadores de cable que existen en Europa, espera conseguir este a?o el punto de equilibrio -sin p¨¦rdidas ni beneficios- tras dos a?os de soportar cuantiosas p¨¦rdidas (se calculan unos 200 millones de pesetas al mes).Este canal comenz¨® a emitir en los primeros meses de 1987 con el apoyo empresarial de casi todas las cadenas privadas de televisi¨®n del Reino Unido y por Virginia Group.
Desde hace poco m¨¢s de un a?o ejerce el control del canal la familia italiana Marcucci. Es precisamente la responsable de esta familia en el negocio, Marialina, quien afirma que la pretensi¨®n de Super Channel es no s¨®lo conseguir la m¨¢xima penetraci¨®n, "porque ya lo hemos hecho", sino tambi¨¦n ser la televisi¨®n transnacional m¨¢s rentable. "Para ello nos ayudar¨¢ el hecho de que podamos transmitir en tres idiomas". Su oferta de programaci¨®n se centra en la m¨²sica, los deportes y accidentalmente las pel¨ªculas. Tambi¨¦n da mucha importancia a la informaci¨®n.
Malcolm Tallantire, especialista brit¨¢nico en difusi¨®n de se?ales de televisi¨®n por sat¨¦lite y directivo de Super Channel, se muestra optimista respecto al desarrollo en un pr¨®ximo futuro de esta y otras modalidades de televisi¨®n, aunque especifica que "la funci¨®n de la televisi¨®n por sat¨¦lite consistir¨¢ en llegar hasta las cabeceras de cable".
"En la actualidad todav¨ªa existen muchas barreras de tipo econ¨®mico, pol¨ªtico y burocr¨¢tico para un correcto desarrollo del cable, pero el futuro nos traer¨¢ m¨¢s libertad y m¨¢s opciones t¨¦cnicas para fortalecer el desarrollo de las nuevas redes", a?ade Tallantire. "Curiosamente, en algunos pa¨ªses del Este, como la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana, el cable ha tenido un gran desarrollo, y esto nos ha facilitado las cosas".
Un mill¨®n de conexiones
Marcucci y Tallantire se sienten muy satisfechos del desarrollo que ha alcanzado la cadena en Espa?a, donde tiene cerca de un mill¨®n de conexiones, seg¨²n las cifras que barajan. Super Channel llega a Espa?a a trav¨¦s de antenas parab¨®licas que miden entre uno y tres metros. Por ello encuentra una mayor penetraci¨®n en las comunidades que tienen este tipo de antenas y a trav¨¦s de los v¨ªdeos comunitarios.Las televisiones v¨ªa sat¨¦lite -50 canales actuales m¨¢s otros muchos previstos- han comenzado una dura carrera por la conquista no s¨®lo de los 123 millones de hogares que tienen aparato de televisi¨®n en los pa¨ªses occidentales de Europa, sino tambi¨¦n de los 31 millones de familias o individuos que disponen de un receptor en pa¨ªses de la zona del Este (sin contar la URSS ni Turqu¨ªa).
Te¨®ricamente, la televisi¨®n transnacional podr¨ªa llegar a estos 154 millones de hogares, aunque en la pr¨¢ctica no es posible porque muchos de ellos no poseen un equipo de recepci¨®n adecuado y las redes de cable s¨®lo alcanzan en Europa occidental un 40%, es decir, 52 millones de hogares. En Europa del Este existen importantes redes de cable en Hungr¨ªa, Checoslovaquia y la RDA.
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