Fin de una mitolog¨ªa

Jam¨¢s el tenor italiano Enrico Caruso cant¨® en el Teatro Amazonas de Manaos, ni bail¨® all¨ª la rusa Ana Pavlova, ni actu¨® la francesa Sara Bernhardt. ?stas y otras muchas leyendas se tejieron en los a?os de la decadencia del teatro. Eran los mitos asociados con la era de esplendor del caucho y forman parte del realismo m¨¢gico de la Amazonia. A veces estos mitos se difunden todav¨ªa m¨¢s, gracias al efecto multiplicador del cine, como el de la pel¨ªcula del director alem¨¢n Werner Herzog Fitzcarraldo.El profesor Mario Ypiranga, a sus 81 a?os y a pesar de la dificultad de su sordera, explica que la pel¨ªcula y su director no gozan de sus simpat¨ªas. Con su celo de historiador, explica Ypiranga que "esa pel¨ªcula es una maldici¨®n" y a?ade sobre Herzog que "ese camarada estuvo aqu¨ª a consultarme. La pel¨ªcula puede gustar mucho a la gente, pero a m¨ª, como amaz¨®nico, no me gust¨®. Le expliqu¨¦ c¨®mo era el Manaos antiguo, los tipos de carruaje de la ¨¦poca y le dije que Caruso nunca estuvo aqu¨ª. Yo pas¨¦ 30 a?os, revis¨¦ todos los peri¨®dicos y no encontr¨¦ rastro de Caruso. El director de cine dijo que no importaba, que lo pondr¨ªa en la pel¨ªcula porque as¨ª era m¨¢s comercial".

Sara Bernhardt

A?ade Ypiranga que "adem¨¢s la figura de Caruso no tiene nada que ver con la realidad. Caruso era barrigudo y fuerte, como usted", explica al enviado de este peri¨®dico, y agrega que "Sara Bernhardt s¨®lo estuvo en R¨ªo y se rompi¨® una pierna y de all¨ª regres¨® a Par¨ªs inmediatamente sin venir a Manaos".

A la gente esta desmitificaci¨®n no le importa mucho. El poeta Thiago de Mello relata la an¨¦cdota de que un d¨ªa oy¨® a su padre polemizar con un amigo sobre si la Bernhardt actu¨® o no en Manaos. No recuerda el poeta si su padre o el amigo zanj¨® con rapidez la discusi¨®n: "Si vino o no vino no tiene la menor importancia. No vale la pena discutir, pero una cosa s¨ª quiero decirle: si no vino, nunca se dar¨¢ cuenta de lo que se perdi¨®".

Esa misma parece ser la actitud del director de la ¨®pera de Manaos, Fernando Bicudo. Reconoce que Caruso jam¨¢s estuvo en Manaos, pero a?ade inmediatamente: "No importa, porque ahora s¨ª que la leyenda se har¨¢ realidad. El d¨ªa 29 estar¨¢ en Manaos Pl¨¢cido Domingo para cantar Carmen. Pl¨¢cido Domingo es el Caruso actual".

Otra de las pol¨¦micas o mitos que no se pudieron verificar con los estudios cient¨ªficos fue la versi¨®n de que los adoquines de la entrada del teatro estaban hechos de caucho, para amortiguar el ruido de los carruajes y evitar que molestasen a la ac¨²stica de la sala. Los estudios demostraron que ¨¦sta era una de tantas leyendas.

Adem¨¢s de la tarea de reconstruir cl espacio f¨ªsico, una persona que sin duda podr¨ªa servir de inspiraci¨®n para una versi¨®n de Fitzcarraldo es el nuevo director de la ¨®pera, Fernando Bicudo. A sus 43 a?os, Bicudo se jacta de haber tenido una ficha gruesa en la polic¨ªa pol¨ªtica de la dictadura, que el nuevo presidente, Fernando Collor, acaba de disolver.