El CSN condiciona la apertura de Vandell¨°s a una inversi¨®n de 80.000 millones

El grupo el¨¦ctrico Hifrensa, propietario de la nuclear Vandell¨°s 1 (Tarragona), la planta at¨®mica que sufri¨® el pasado 19 de octubre el accidente m¨¢s grave registrado en una central espa?ola, deber¨¢ invertir cerca de 80.000 millones de pesetas para que el reactor vuelva a funcionar, seg¨²n fuentes de la Administraci¨®n central. Este c¨¢lculo se desprende de un primer an¨¢lisis del informe definitivo que ayer aprob¨® el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).

El informe, que fue debatido ayer en el pleno del Consejo, establece unas duras condiciones para que Hifrensa pueda volver a reabrir Vandell¨°s 1, cuyo permiso de explotaci¨®n definitivo fue suspendido el pasado 24 de noviembre, cuando se public¨® el informe preliminar sobre el accidente. Las conclusiones del documento final, compuesto por ocho puntos, incluye un paquete de medidas que exigen a Hifrensa la reconversi¨®n de Vandell¨°s 1 en una central de tercera generaci¨®n, es decir, de las m¨¢s avanzadas tecnol¨®gicamente, similares a Vandell¨°s 2 o Trillo.Fuentes pr¨®ximas a la Administraci¨®n central evaluaron en cerca de 80.000 millones de pesetas la inversi¨®n que deber¨ªa realizar Hifrensa para poner a punto a la planta siniestrada, que dej¨® de funcionar desde el pasado 19 de octubre cuando sufri¨® el accidente m¨¢s grave ocurrido jam¨¢s en una planta espa?ola. La inversi¨®n estimada por las mismas fuentes es muy superior a la efectuada por las empresas el¨¦ctricas, que cifr¨® en un primer momento las reparaciones en unos 20.000 millones de pesetas, sin incluir el lucro cesante al paralizarse la producci¨®n energ¨¦tica. Para que pueda hacerse un c¨¢lculo comparativo con otras plantas espa?olas, el presupuesto de construcci¨®n de Vandell¨°s 2 se cifr¨® en 330.000 millones de pesetas.

Requerimiento

El CSN ha requerido a Hifrensa, debido al largo periodo que la central deber¨¢ permanecer en parada segura, la elaboraci¨®n de un programa de mantenimiento de los equipos, sistemas y componentes de la central y una puesta al d¨ªa de las instalaciones. Portavoces de Hifrensa eludieron ayer hacer ning¨²n tipo de declaraci¨®n sobre el contenido del informe aprobado por el CSN, aunque fuentes pr¨®ximas al sector afirmaron que las compa?¨ªas el¨¦ctricas, tras efectuar un exhaustivo estudio de las condiciones exigidas, no descartan afrontar la inversi¨®n de las once condiciones exigidas. Entre las medidas se incluye un nuevo dise?o del edificio el¨¦ctrico, la construcci¨®n de una nueva sala de control y la independencia de las v¨ªas de soplado (sistema de refrigeraci¨®n).El CSN habr¨ªa optado por imponer un duro paquete de condiciones a Hifrensa por dos motivos: por un lado, evitar, sentar un precedente de cierre: y, por otro, eludir el pago de una cuantiosa indemnizaci¨®n a la propiedad debido a que es la ¨²nica compa?¨ªa que posee el, permiso de explotaci¨®n definitivo, frente a las restantes centrales que s¨®lo lo poseen con car¨¢cter provisional.

El informe establece que el accidente se origin¨® por un fallo mec¨¢nico que provoc¨® un desprendimiento de las aspas de un motor de la turbina del generador n¨²mero 2 de la central. La aver¨ªa se podr¨ªa haber evitado si Hifrensa hubiera aplicado dos de las cinco medidas de seguridad exigidas por el CSN tras el el incendio de la central de Chernobil (mejora del sistema de protecci¨®n contra incendios y la utilizaci¨®n del circuito raie como sistema de refrigeraci¨®n de urgencia). El documento advierte tambi¨¦n que si se hubiera ejecutado el plan de reevaluaci¨®n de la seguridad el accidente hubiera evolucionado de forma distinta.