Precisiones billaristas

Agradecer¨ªa la publicaci¨®n de esta carta como aclaraci¨®n a una referencia que de m¨ª se hace en el art¨ªculo de la. p¨¢gina 17 de Deportes del lunes 30 de abril, con motivo de una entrevista a Jos¨¦ Carrillo, campe¨®n de Espa?a de billar a tres bandas. En ella se dice: "Un billarista que no debe guardar buen recuerdo de El Gordo es Cayo Mu?oz, que perdi¨® hace poco en Copenhague nueve partidas seguidas al billar americario, a 2.000 coronas danesas (33.000 pesetas) cada una".La afirmaci¨®n no es exacta y s¨®lo se explica en boca de Carrillo dentro del contexto de una reuni¨®n distendida, en la que la exageraci¨®n puede llegar a ser uno de los componentes jocosos m¨¢s importantes, sin que pudiera imaginar su publicaci¨®n, seg¨²n ¨¦l mismo me ha comentado.

Se est¨¢ refiriendo al desplazamiento que hicimos a Suecia para una eliminatoria acompa?ando a Claudio Nadal y Jos¨¦ Quetglas en febrero de 1985. De ellos he recabado informaci¨®n para confirmar mi creencia de que en realidad fueron tres o cuatro partidas a unas 4.000 pesetas cada una. El no hacer referencia a un antecedente m¨¢s cercano indica bien claro que no es costumbre de los billaristas apostar dinero. Si lo hacemos alguna vez es m¨¢s por contribuir al regocijo general que por la apuesta en s¨ª, y esto en contadas ocasiones. Por lo que a m¨ª respecta, han podido ser una docena de veces en m¨¢s de 20 a?os.

Lo que s¨ª prodigamos m¨¢s a menudo son las reuniones festivas, sobre todo al finalizar los campeonatos, en las que Pepe Carrillo es el protagonista, indiscutible, el que siempre tiene chistes nuevos, el de la guasa y socarroner¨ªa a base de puyas y piques, al que lo mismo le dan los ceros delante que detr¨¢s. Todo es v¨¢lido con tal de llegar al efecto hilarante que siempre consigue. As¨ª es Pepe, el Pepe del billar espa?ol, nuestro buen amigo de siempre.

Pero pienso que esta vez ha ido demasiado lejos en su broma, dando una imagen falsa de nuestro deporte. De m¨ª mismo, de favorecido de la fortuna, de insensato o simplemente de tonto de la pel¨ªcula, que no me corresponde.-