El amigo hungaro de Paesa utiliz¨® una empresa fiduciaria para recaudar fondos
ENVIADO ESPECIAL Gabor Kinces-Deak, un h¨²ngaro que en diciembre huy¨® de Suiza dejando tras de s¨ª un agujero de m¨¢s de 1.800 millones de pesetas, y amigo del presunto colaborador de los GAL Francisco Paesa, se vali¨® de una carta de la Fiduciaria Aberle para captar fondos a trav¨¦s de su empresa New Century Trading, seg¨²n documentos a los que ha tenido acceso este diario. La Fiduciaria Aberle ha gestionado la mayor¨ªa de las sociedades, paname?as y de Llechtenstein, utilizadas por Paesa para sus operaciones. [Las empresas fiduciarias son las que act¨²an por cuenta de otra empresa, normalmente con objeto de ocultar al verdadero interesado].
La carta emitida por la Fiduciaria Aberle en apoyo de Kinces-Deak y su empresa New Century Trading (NCT) data de septiembre de 1989, cuando el h¨²ngaro se hallaba ya en graves dificultades. El volumen creciente de cr¨¦ditos contra¨ªdos por la NCT, entre prestamistas peque?os y grandes, a intereses desorbitados que variaron entre un 10% y hasta un 30% mensual, hac¨ªa imposible que Kinces cumpliera sus obligaciones. El h¨²ngaro huy¨® definitivamente de Suiza el 15 de diciembre, y la NCT fue declarada en quiebra el pasado 25 de enero.
La juez que instruye en Ginebra el caso suscitado por m¨¢s de 20 demandantes que reclaman a Kinces unos 26 millones de francos suizos (m¨¢s de 1.800 millones de pesetas) est¨¢ investigando a Francisco Paesa porque varios afectados le consideran el hombre que realmente mov¨ªa los hilos de NCT, a la sombra de Kinces (v¨¦ase EL PA?S del mi¨¦rcoles 27 de junio).
A pesar de que la situaci¨®n de la NCT era ya insostenible, la carta de la Fiduciaria Aberle, fechada el 7 de septiembre de 1989 en Vesenaz, localidad pr¨®xima a Ginebra donde esta compa?¨ªa tiene su sede, afirmaba "a quien corresponda" que la NCT hab¨ªa tenido un volumen anual de ventas de 90 millones de francos suizos (m¨¢s de 6.000 millones de pesetas) en los tres a?os precedentes. A?ad¨ªa Aberle que "el valor neto de la NCT, sus filiales y otras compa?¨ªas extranjeras propiedad del se?or Gabor Kinces-Deak, incluido su patrimonio personal, superan los 25 millones de francos suizos (m¨¢s de 1.700 millones de pesetas)".
Cuando Kinces huy¨® de Suiza, tres meses m¨¢s tarde, lo ¨²nico que dej¨® fue un despacho alquilado, con apenas dos empleados. All¨ª no hab¨ªa contabilidad, ni dinero, ni inversiones inmobiliarias, ni sociedades de valor neto.
Jack Pierre Aberle, ciudadano suizo propietario de la fiduciaria que lleva su nombre, ha declarado con posterioridad a estos hechos que entreg¨® la carta a Kinces con la indicaci¨®n expresa de que no pod¨ªa utilizarla, ya que ten¨ªa dudas sobre los balances de la NCT que le hab¨ªa entregado. Siempre seg¨²n Aberle, los balances resultaron ser falsos, por lo que conmin¨® a Kinces a que le devolviera el escrito, cosa que consigui¨® el 22 de septiembre. A?ade el fiduciario que, despu¨¦s de esa fecha, Kinces pudo utilizar fotocopias de la carta.
Francisco Paesa afirma, por su parte, que no tuvo nada que ver en la relaci¨®n Aberle-Kinces, y reconoce los estrechos lazos que les unen a ambos.
Paesa asegura tambi¨¦n que la Fiduciaria Aberle no se ocupa ya de sus asuntos, aunque le resulta dif¨ªcil precisar desde cu¨¢ndo. Luego, a?ade que relev¨® a Aberle de sus funciones a ra¨ªz de que un peri¨®dico espa?ol asociara el nombre del suizo al suyo propio, en el contexto de las investigaciones sobre los GAL. El nombre de Jack Pierre Aberle se public¨® por primera vez en el diario El Mundo el 14 de noviembre de 1989. Hab¨ªan pasado dos meses desde que el fiduciario suizo entregara su carta de presentaci¨®n a Kinces.
Por esas mismas fechas, Paesa ultimaba su nombramiento como embajador ante la ONU de Santo Tom¨¦ y Pr¨ªncipe.
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