El juez Baltasar Garz¨®n abri¨® diligencias a Juan Guerra para aclarar la imputaci¨®n de Portabales
El juez Baltasar Garz¨®n abri¨® a primeros de mes diligencias previas contra Juan Guerra tras tener conocimiento de las declaraciones del narcotraficante arrepentido Ricardo Portabales, que imput¨® al hermano del vicepresidente haber tenido conocimiento de que el dinero a invertir en sus empresas proced¨ªa del narcotr¨¢fico. Aunque una posible inculpaci¨®n formal del hermano del vicepresidente en este asunto aparece a¨²n muy difuminada, fuentes jur¨ªdicas no descartaron que Juan Guerra sea citado a declarar. La eventual responsabilidad de Juan Guerra se investigar¨¢ al margen del sumario principal.
El nombre de Juan Guerra aparece referenciado en dos de las declaraciones del narcotraficante arrepentido Ricardo Portabales que constan en el sumario. Portabales cit¨® por primera vez el nombre de Guerra ante el juez Garz¨®n el 7 de marzo pasado. En una primera declaraci¨®n, Portabales dijo que no cre¨ªa que Guerra supiera que el dinero que se iba a invertir en varias de sus empresas procediera de la droga.Sin embargo, en una segunda declaraci¨®n, efectuada el 8 de junio y que obra en el folio 543 vuelto del tomo 3 del sumario, el juez Garz¨®n pregunt¨® a Portabales si sab¨ªa Juan Guerra que el dinero que recib¨ªa era de narcotraficantes. En su respuesta, Portabales "estima que, por supuesto, sab¨ªa que el dinero proced¨ªa del narcotr¨¢fico". El arrepentido explic¨® que no lo hab¨ªa dicho antes para no complicar a otras personas.
Esta segunda declaraci¨®n dio lugar a que en las fechas en que el sumario estaba declarado secreto, la Fiscal¨ªa Antidroga solicitase al juez Baltasar Garz¨®n la apertura de diligencias para esclarecer esta imputaci¨®n. Garz¨®n accedi¨® y abri¨® diligencias previas, de las que se tuvo conocimiento ayer, al acceder los abogados al tomo noveno del sumario.
Serias reservas
Estas diligencias se abrieron porque el juez consider¨® conveniente investigar, separadamente del sumario principal sobre el narcotr¨¢fico, las dos imputaciones de Portabales, por m¨¢s que ambas se tratasen de referencias procedentes de terceros. En la actualidad, est¨¢n pendientes de un informe sobre competencia de la Fiscal¨ªa Antidroga, que deber¨¢ solicitar, o bien su reparto entre los cuatro juzgados centrales de la Audiencia Nacional, o bien que se env¨ªe el asunto a Sevilla para que se adjunte all¨ª a la causa abierta contra el hermano del vicepresidente.
No obstante, fuentes de la m¨¢xima solvencia de la Audiencia Nacional expresaron serias reservas de que estas diligencias previas puedan conducir a una imputaci¨®n formal contra Juan Guerra, basada ¨²nicamente en las dos referencias del narcotraficante arrepentido. Aunque es muy posible que si el asunto pasa a reparto en la Audiencia Nacional, Guerra sea llamado a declarar dentro de algunas semanas, las citadas fuentes indicaron que se tratar¨ªa m¨¢s de "cumplimentar un tr¨¢mite" de la investigaci¨®n que de inculpar formalmente a Juan Guerra en un delito vinculado al narcotr¨¢fico.
A medida que los abogados van tomando mayor conocimiento del sumario crece el convencimiento generalizado de que las imputaciones m¨¢s serias y fundamentadas del arrepentido Ricardo Portabales se dirigen hacia los narcotraficantes gallegos. En el estado actual de la investigaci¨®n, las consecuencias de la operaci¨®n contra el narcotr¨¢fico se centran en la completa desarticulaci¨®n del grupo de capos detenidos.
Por el contrario, cunde un fuerte excepticismo sobre las expectativas de desarticulaci¨®n de las redes de blanqueo de dinero procedente del narcotr¨¢fico. Adem¨¢s de la escasez de infraestructura policial para investigar la procedencia de patrimonios, movimientos financieros y las inversiones de los narcotraficantes -de la que ya se quej¨® el juez Garz¨®n-, las citadas fuentes recordaron que el blanqueo de dinero fue penalmente tipificado a partir de la reforma de 1988, por lo que las anotaciones e imputaciones de Portabales, que se refieren a a?os anteriores, tendr¨ªan escasa entidad en el terreno punitivo.
Por otra parte, el abogado Enrique Beamud, defensor de Portabales, asegur¨® ayer que ¨¦ste "no padece ninguna enfermedad mental". Beamud se?al¨® que el pasado mes de mayo solicit¨® que practicasen a su cliente dos pruebas periciales por m¨¦dicos forenses especializados en psiquiatr¨ªa, cuyos resultados, expresados en dos informes, coincidieron en que Portabales no sufre ning¨²n tipo de trastorno ps¨ªquico. La segunda de las pruebas estableci¨®, seg¨²n Beamud, que Portabales no sufre "ning¨²n trastorno de mentalidad y tiene buena capacidad de testimonio".
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