La forma de la nariz

Enrique Cerd¨¢-Olmedo, profesor de Gen¨¦tica de la Universidad de Sevilla, se pregunt¨® ante los asistentes al seminario celebrado esta semana en Santander, por qu¨¦ una modificaci¨®n quir¨²rgica de la forma de la nariz no conmueve a nadie mientras que si se pudiera cambiar mediante procedimientos de ingenier¨ªa gen¨¦tica levantar¨ªa una polvareda. Se interrog¨® tambi¨¦n sobre por qu¨¦ le pueden a uno quitar o poner tal ¨®rgano en plepa inconsciencia tras un accidente y, como le pas¨® a ¨¦l, despertar "con un clavo en el cuerpo" y, sin embargo, se multiplican los recelos cuando "en vez de cortar se trata de aplicar una terapla g¨¦nica". Vicente Mont¨¦s, especialista en Derecho Civil, y Jaime Peris, de Penal, ambos de la Universidad de Valencia, replicaron.Peris fue contundente: "Si a usted que se llama Enrique le hubieran hecho sin su consentimiento una operaci¨®n que lo hubiera convertido en Mar¨ªa Jos¨¦, seguro que habr¨ªa recurrido a un jurista para reclarnar". Mont¨¦s, neg¨® que las cautelas que plantean los juris.tas sean meros prejuicios. "Nosotros, explic¨®, tratamos de asegurar ciertos valores entre los que hay que destacar la garant¨ªa de que la persona tenga una esfera de libertad"; es decir, "pueda decidir por s¨ª misma sobre su futuro". Y junto a eso, como vivimos en sociedad hay que establecer unas reglas, dijo, y "no cualquiera", precis¨®, "puede hacer cualquier cosa sobre algo tan importante como el cuerpo de otra persona".

Por otra parte, varios expertos reunidos en otro curso sobre manipulaci¨®n gen¨¦tica celebrado en El Escorial (Madrid) abogaron por la creaci¨®n de un Comit¨¦ Nacional de Bio¨¦tica, seg¨²n informa Mayka S¨¢nchez. Este comit¨¦ es urgente para poder desarrollar satisfactoriamente la ley de reproducci¨®n humana y llenar algunas de sus lagunas.