Los cazabombarderos de EE UU esperar¨¢n orden del mando saud¨ª para disparar
IGNACIO CARRI?N ENVIADO ESPECIAL, Los aviones de combate norteamericanos no atacar¨¢n a los aviones iraqu¨ªes sin haber recibido antes orden expresa del mando saud¨ª. Esta curiosa transferencia de poder prevista para el comienzo de la confrontaci¨®n b¨¦lica tendr¨ªa por finalidad evitar que sea un piloto norteamericano el primero en abrir fuego contra el enemigo, desencadenando as¨ª, incluso por error, una guerra con Irak.
Las normas de combate, publicadas en la prensa saud¨ª, no incluyen situaciones inesperadas de riesgo excepcional, en las que ser¨ªa el mismo piloto quien decidiera efectuar los disparos. El deseo evidente de los Estados Unidos es que no se le adjudique a su Ej¨¦rcito el protagonismo al iniciar con una acci¨®n aislada la apertura brutal de las hostilidades, algo que ser¨ªa aprovechado por Sadam Husein para enfrentar a las naciones ¨¢rabes que hoy le niegan su apoyo con la gran potencia enemiga del Islam.El coronel Tom Bliss, jefe de la flota de aviones de reconocimiento y aviso (E-3) Awacs, que sobrevuel¨¢n d¨ªa y noche el territorio saud¨ª, dijo en Dahran que hay que evitar a toda costa una de esas situaciones t¨ªpicas en las que primero se dispara y luego se dan explicaciones. Cuando se produzca una alarma y ¨¦sta llegue al centro de operaciones, ser¨¢ un saud¨ª quien encienda la luz verde. Naturalmente en ese centro de operaciones estar¨¢ de servicio ininterrumpido un oficial norteamericano. "En la mayor¨ªa de los casos ser¨¢ el militar saud¨ª quien identifique oficialmente el avi¨®n enemigo y quien decida que hay que abrir fuego contra ¨¦l", indic¨® Bliss, "ya que queremos que la orden de abatirlo salga del mando saud¨ª". El coronel insisti¨® en que se est¨¢n tomando todas las medidas para evitar que cualquiera apriete el gatillo a la primera de cambio.
La misma pol¨ªtica es la que se ha impuesto a las tropas de tierra estadounidenses al haberlas des plegado muy por detr¨¢s de las saud¨ªes y sus aliados ¨¢rabes, unos efectivos que forman la primera l¨ªnea del frente.
Vuelos nocturnos
Seg¨²n el mando de las Fuerzas A¨¦reas norteamericanas, los aviones Awacs vienen detectando ¨²ltimamente salidas nocturnas muy escasas de la aviaci¨®n iraqu¨ª. Los norteamericanos, en cambio, hacen ejercicios d¨ªa y noche cuidando al m¨¢ximo no violar ni el espacio a¨¦reo iraqu¨ª ni el de Kuwait. La actividad de los pilotos iraqu¨ªes es intensa durante el d¨ªa, y realizan ejercicios de combate en ocasiones a menos de 10 kil¨®metros de la frontera con Arabia Saud¨ª.
Las autoridades norteamericanas insisten en que no creen que un ataque a¨¦reo vaya a ser la chispa que desencadene la guerra. Se inclinan m¨¢s por la tesis de que si Sadam Husein inicia el conflicto lo har¨¢ por tierra moviendo sus 5.000 tanques y las divisiones m¨¢s preparadas de su Ej¨¦rcito de un mill¨®n de soldados. La superioridad en carros de combate y hombres seguir¨¢ siendo ventajosa en dos a uno para Bagdad, incluso cuando Estados Unidos hayan completado todo su despliegue en Arabia Saud¨ª.
Pero no puede decirse lo mismo del escenario a¨¦reo, donde seg¨²n todos los expertos la aviaci¨®n americana dominar¨¢ desde el principio al enemigo.
Para tener informado al Ej¨¦rcito destinado a la operaci¨®n escudo del desierto, las Fuerzas A¨¦reas estadounidenses acaban de poner en circulaci¨®n el nuevo peri¨®dico Dessert Defender (El Defensor del Desierto), publicaci¨®n patri¨®tica de 12 p¨¢ginas de las que dos se dedican a crucigramas y c¨®mics con los que matar el tiempo hasta que se encuentren desplegados satisfactoriamente todos los efectivos. Seg¨²n el Pent¨¢gono, la fecha se fij¨® en el 15 de octubre. Si no se precipitan antes los acontecimientos, lo m¨¢s probable es que se le dar¨¢ entonces el ultim¨¢tum a Sadam Husein y empezar¨¢ la cuenta atr¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.