Al matadero

Directamente al matadero pod¨ªan haber llevado a las reses de Ana Romero lidiadas ayer en Zaragoza. Sin el trap¨ªo necesario para esta plaza de primera, pues toros eran, cierto, pero parec¨ªan contrahechos. Sus cabezas, los que la ten¨ªan, eran c¨®modas en demas¨ªa, su mansedumbre rayana en la apat¨ªa, y de fuerzas andaban como para abolir el tercio de varas para siempre, total para lo que sirve.Hasta la salida del cuarto aguant¨® esta ben¨¦vola afici¨®n. Aquel mulo impresentable, derrengado de los cuartos traseros, fue cambiado, pero por otro mulo peor de Mart¨ªnez Benavides. El presidente, en un ataque de extra?os celos en sus deberes, conden¨® tras la tercera entradasalida al caballo a banderillas negras a tan espl¨¦ndido ejemplar. Se enfad¨® Emilio Mu?oz y algo de raz¨®n llevaba; hasta aguant¨® a un picador para ejercer su deber a pesar del pa?uelo encarnado del palco, m¨¢s el toro dijo que de puyazos turur¨². Y all¨ª qued¨® la plaza en manifiesta controversia.

El trianero, tras haber recibido bronca a la muerte de su primero por estar precavido y sin emplearse ante las evidentes coladas de la res, escuch¨® la divisi¨®n tras despachar a su segundo, al que pinch¨® tras un breve traste¨ªllo.

Dos inv¨¢lidos le tocaron en suerte a Joselito. Se le ve puesto y profesional en todos los sentidos. Tampoco fue meritoria su labor ante tama?os ejemplares pero s¨ª cabe destacarse el gusto y la inteligencia por elaborar faena templad¨ªsima a su primero y ese intentarlo todo con su segundo. Ojal¨¢ procurara no hacer de enfermero y s¨ª de diestro excelente, porque lo es, aunque para ello tuviera que estar delante de toros ¨ªntegros.

A Ra¨²l Zorita tambi¨¦n le toc¨®, con su primero, un inv¨¢lido al que dud¨®, bail¨® las zapatillas y abus¨® en demas¨ªa del pico de la muleta. Con el sexto, el m¨¢s noble y de mejor juego de la corrida, tore¨® ajustado por delantales y calidad tuvo una faena de muleta con gusto elaborada, sobre todo con derechazos a los que imprimi¨® retazos pintureros con relajo pero sin remate final por rajarse el toro.

Espartaco quiere torear menos

Espartaco, que en la presente temporada ha toreado m¨¢s de 100 corridas, quiere reducir su n¨²mero de actuaciones el a?o pr¨®ximo -informa Efe- y reservarse para festejos importantes.Tambi¨¦n ha anunciado que est¨¢ dispuesto a torear seis toros de Eduardo Miura, en Nimes, en la Feria de Pentecost¨¦s de 1991. Espartaco ya lidi¨® miuras como ¨²nico espada en la Feria de Sevilla de 1987.