'O sole mio' cumple 100 a?os

Hace 100 a?os, un poeta compuso un poema que hablaba del sol de N¨¢poles; poco despu¨¦s, un director de orquesta napolitano puso m¨²sica a esta letra. La canci¨®n O sole mio ha dado desde entonces la vuelta al mundo y ha sido cantada por Caruso, Pavarotti, Carreras o Elvis Presley. O sole mio es conocida en todo el mundo, y de tal forma se identifica con Italia que en los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio (1964) se toc¨® en lugar del himno nacional italiano. Ahora la familia Bideri, propietaria de los derechos de autor, se dispone a celebrar los 100 a?os de O sole mio con diversos actos.

Cantada por centenares de millones de personas es conocida, al menos por su tonada, por chino. senegaleses y mongoles. En el Reino Unido se utiliza como eslogan publicitario de unos helados italianos, cantada por un gondolero. Olvidan o no saben los brit¨¢nicos que una ley municipal de Venecia proh¨ªbe a los gondoleros cantarla, porque muchos americanos solicitan una serenata veneciana con las notas de O sole mio, provocando la indignaci¨®n de los venecianos.La prohibici¨®n no parece preocupar a la familia Bideri, que durante un siglo ha vivido de los derechos de la canci¨®n y se dispone a festejar los 100 a?os de O sole mio.

Hace 100 a?os, Giovanni Capurro (N¨¢poles, 1859-1920) escribi¨® una poes¨ªa muy sencilla, en la que el amor, el sol, la nostalgia de N¨¢poles, aparecen en las rimas de una declaraci¨®n de amor a una hipot¨¦tica dama napolitana en una ventana.

En copias muy bien cuidadas e impresas, las poes¨ªas, como se les llamaba, se vend¨ªan en las esquinas de cada calle. Las copielle (peque?as copias), circulaban como regalos que los enamorados recitaban a la mujer amada.

Ferdinando Bideri, bar¨®n y editor, amigo de D'Annunzio, Di Giacomo, Benedetto Croce, Pirandello, Glovanni Pascoli, compr¨® los derechos del texto, y cuatro a?os despu¨¦s, la m¨²sica, compuesta por Eduardo de Capua, el autor m¨¢s representativo en el g¨¦nero de la canci¨®n napolitana, dejando as¨ª en casa Bideri la herencia de O sole mio.

Nostalgia

Dedicada a la noble se?ora Nina Arcoleo, el autor, Eduardo de Capua, director de orquesta, se encontraba en Mosc¨², y sent¨ªa tanta nostalgia por el sol napolitano que, sentado al piano, la concibi¨® r¨¢pidamente. Compone primero el andantino; luego, el fragmento cantado, y despu¨¦s, el ritornello de la que ser¨ªa la canci¨®n m¨¢s famosa del mundo."La canci¨®n es una alcahueta", dice hoy don Paolo Villevielle Bideri, padre de Flavia, Ferdinando, Marioletta, Desir¨¦ y esposo de Loredana, de la compa?¨ªa Bideri, propietaria de los derechos de casi todas las canciones napolitanas tradicionales, "y sirve para seducir a una mujer. En ocasiones se podr¨ªa pedir la complicidad a la orquesta, que tocaba la m¨²sica, y el hombre podr¨ªa declararse susurrando y bailando sus versos". "Para nosotros, los Bideri", agrega el bar¨®n, "ha escrito D'Annunzio, y Elvis Presley transform¨® O sole mio en una canci¨®n de rock".

"Pero para un napolitano es f¨¢cil cantar", cuenta Bideri; "toda N¨¢poles es una canci¨®n a toda voz, con toda la luz y el color que tiene N¨¢poles y que todo napolitano lleva en el alma".

A la pregunta de c¨®mo es posible que una canci¨®n tan simple haya dado la vuelta al mundo, Bideri a?ade: "Piense que cuando la presentaron en el Festival de Piedigrotta -Piedigrotta es una zona de N¨¢poles famosa por el festival de la canci¨®n, al que concurren los compositores para darse a conocer, y que ha impuesto no s¨®lo la canci¨®n popular, sino tambi¨¦n los festivales que ahora se hacen. en todo el mundo- O sole mio alcanz¨® el segundo lugar. Mi abuelo compr¨® los derechos s¨®lo porque era amigo de Di Capua y ¨¦ste necesitaba las dos liras para jugar a la loter¨ªa. Eduardo di Capua iba todos los viernes a ver, a mi abuelo, don Ferdinando, y dec¨ªa tener un billete seguro. En realidad, esa vez nos regal¨® a nosotros el billete, porque la canci¨®n se convirti¨® en una de las m¨¢s famosas del rnundo".

La quinta generaci¨®n de los Bideri ha podido este a?o escuchar la canci¨®n en labios de Pavarotti, Carreras, Domingo, as¨ª como en todas las versiones de Jonny Dorelli, Teddy Reno, Domenico Modugno, etc¨¦tera.Ahora la familia se dispone a montar en N¨¢poles un museo de la canci¨®n napolitana.

Un congreso y otras iniciativas ser¨¢n los dignos festejos que conmemoren los 100 a?os de O sole mio, pero las m¨²ltiples actividades de la familia Bideri -que se extienden al cine- prev¨¦n otras iniciativas.