Ni casas del pueblo ni 'batzokis'

Los dos principales aspirantes a la formaci¨®n de un Gobierno en el Pa¨ªs Vasco tuvieron que resolver d¨ªas atr¨¢s un problema adicional a los ya planteados en la mesa de negociaciones. La elecci¨®n del lugar para los debates se erigi¨® como un verdadero obst¨¢culo para la continuaci¨®n del proceso, hasta el punto de que el portavoz del PNV, Juan Ram¨®n Guevara, se refiri¨® al nuevo marco para los contactos, el Parlamento vasco, como una forma de "no malograr las negociaciones". Tras muchas llamadas de tel¨¦fono, ni las casas del pueblo (los locales del PSOE), ni los batzokis (sedes sociales del PNV) fueron el marco de la cumbre.

El Partido Nacionalista Vasco, como formaci¨®n que invita, insisti¨® a trav¨¦s del tel¨¦fono a sus interlocutores, los socialistas, que sus sedes sociales eran las m¨¢s apropiadas. Los votos, representaci¨®n parlamentaria y el liderazgo que les proporciona para la tarea de formar Gobierno eran razones m¨¢s que suficientes para que un retrato de Sabino Aranagoiti presidiera la cumbre. Sin embargo, los socialistas respond¨ªan que no y que cualquiera de sus locales dispon¨ªa de las mismas comodidades para plantear los temas, e incluso llegar a soluciones.

El Parlamento vasco fue la ¨²ltima de las posibilidades que el PSE ofreci¨® a sus compa?eros de viaje auton¨®mico durante los ¨²ltimos cuatro a?os. Opci¨®n que el PNV finalmente acept¨® un d¨ªa antes del previsto para la celebraci¨®n de la cumbre.

"Cre¨ªamos que no era el adecuado porque puede constituir un precedente de consecuencias no deseables en cuanto a la utilizaci¨®n del Parlamento por personas no parlamentarias y para cuestiones que no entran dentro del ¨¢mbito parlamentario", declar¨® ayer el portavoz de la delegaci¨®n peneuvista, Juan Ram¨®n Guevara, minutos antes de la reuni¨®n, "pero repito que tampoco cre¨ªamos que el lugar deb¨ªa ser motivo suficiente para malograr unas conversaciones".

Nacionalistas y socialistas llevan, desde que los primeros invitasen formalmente a los segundos a negociar un nuevo Gobierno, cuatro reuniones de las que las tres primeras no arrojaron avance alguno. A la primera de las reuniones plenarias, celebrada en martes y 13 en los locales de la ejecutiva provincial del Partido Nacionalista Vasco en Vitoria, sucedieron otras dos sectoriales en Lacua, la casa com¨²n del Gobierno, durante los pasados cuatro a?os. Socialistas y nacionalistas se volvieron a ver, concretamente, en el departamento de presidencia, justicia y desarrollo auton¨®mico que dirige, en funciones, Juan Ram¨®n Guevara.