"No soy un tarugo"
La afici¨®n atl¨¦tica, antes cr¨ªtica con Pizo, le ha convertido ahora en uno de sus ¨ªdolos.Pregunta. ?Sus comienzos en el Atl¨¦tico fueron dif¨ªciles?
Respuesta. El a?o pasado lo pase muy mal. Todas las cr¨ªticas iban contra m¨ª y contra Bustingorri. Era injusto, nunca se ha valorado nuestro trabajo. Despues se nos utiliz¨® como bandera de Clemente, al que le debo mucho de lo que soy, y esto nos perjudic¨® a¨²n m¨¢s.
P. ?Lleg¨® a pensar en abandonar el club?
R. Sinceramente, cre¨ªa que al final de la temporada pasada el club me iba a dar la baja, pero afortunadamente me equivoqu¨¦. En los primeros meses se me pas¨®, por la cabeza dejarlo todo e irme, pero, como profesional que soy, aguant¨¦. La gloria no es no caerse nunca, sino poder levantarte cuando te caes.
P. ?C¨®mo consigui¨® superar esos momentos de cr¨ªticas?
R. Cada vez que tengo un problema prefiero olvidarlo. Me voy al pueblo con mi mujer, me evado. Lo pas¨¦ mal, pero sab¨ªa que con mi trabajo las cosas cambiar¨ªan. El f¨²tbol da muchas vueltas y los que te critican luego te aplauden. Lo malo es que puede darse otra vez la vuelta a la tortilla. Por eso, es fundamental mantener la cabeza fr¨ªa.
P. ?Se le valora ahora?
R. Yo siempre he tenido la conciencia tranquila porque he cumplido mi trabajo. Pero la verdad es que hasta el pasado s¨¢bado no se me hab¨ªa valorado. Los precedentes que exist¨ªan del a?o anterior hac¨ªan que la gente estuviera m¨¢s pendiente de m¨ª. Y jugar bien contra el Madrid siempre es m¨¢s apreciado.
P. ?Es usted el nuevo ni?o mi mado de Jes¨²s Gil?
R. No, creo que no. Todo lo que soy se lo debo ¨²nicamente a mi trabajo, no a recomendaciones. Hace unas semanas no era nada, no jugaba. Pero gracias a mi constancia en los entrena mientos llevo varias jornadas como titular.
P. ? Se le acusa de ser un jugador falto de t¨¦cnica?
R. Se le est¨¢ dando demasiadas vueltas a mi aspecto t¨¦cnico. Al 100% no soy t¨¦cnico, pero tampoco soy tan malo o no estar¨ªa en un club tan importante. Mi mejor virtud es la lucha, pero me defiendo t¨¦cnicamente. No soy un tarugo.
P. Parece que nadie cuestiona su entrega.
R. A mi padre tampoco le gusta que nadie se queje de su trabajo en el taller. Yo no quiero ganarme una bronca por no correr. Como los japoneses, prefiero que me digan que pare por trabajar mucho.
P. ?Le molesta que alguno de sus compa?ros no sea como usted?
R. No. Cada uno tiene su misi¨®n en el campo. Lo que me molesta es que mi trabajo o el de otros compa?eros no se valore tanto como el de otros. L¨®gicamente, la t¨¦cnica es m¨¢s vistosa, pero no m¨¢s pr¨¢ctica.
P. Dec¨ªa Schuster antes del derby que saludar¨ªa a sus ex compa?eros, se dar¨ªan unas patadas y despu¨¦s se ir¨ªa. ?Usted no salud¨® a los madridistas, se llev¨® m¨¢s patadas que ninguno y se fue del campo antes de tiempo?
R. Son cosas que pasan. El s¨¢bado me toc¨® a m¨ª y otro d¨ªa le toca a otro. En esta ocasi¨®n ha tenido m¨¢s repercusi¨®n por los antecedentes y por el rival. Pero estoy tranquilo. Lo ¨²nico que me preocupa es que el equipo gane. A m¨ª me gusta que el trabajo sea noble. Yo juego con nobleza y me imagino que los dem¨¢s tambi¨¦n.
La entrada
P. La entrada de Michel que le apart¨® del terreno de juego, ?fue noble?
R. Creo que conscientemente no lo hizo. Lo mismo despu¨¦s pens¨® lo que hizo y se arrepinti¨® al ver que meti¨® la pata. Pero lo cierto es que el otro d¨ªa no ejerci¨® como profesional. Fue una entrada que no ven¨ªa a cuento, porque no ten¨ªa opci¨®n a robarme la pelota. Su actitud no estuvo bien. Hay que respetar a todo el mundo y conf¨ªo en que no vuelva a suceder.
P. En la temporada anterior, cuando tuvo problemas con Michel, estuvo a punto de propinarle un pu?etazo. En esta ocasi¨®n, ?qu¨¦ se le pas¨® por la cabeza?
R. Cuando me hizo la entrada, me sent¨ª cabreado. Parece mentira que siendo profesionales como somos y despu¨¦s de la experiencia del a?o pasado, se vuelvan a repetir estas tonter¨ªas. Adem¨¢s, nada m¨¢s darme la patada le mir¨¦ y me hizo un gesto como diciendo: "Ahora sigue". Entonces pens¨¦: ¨¦ste ha ido a fastidiarme. Ya se habr¨¢ quedado tranquilo, se sentir¨¢ orgulloso.
P. ?Estima que la entrada fue premeditada o tuvo m¨¢s que ver con el hecho de que perd¨ªan?
R. Est¨¢ claro que cuando te est¨¢ ganando tu eterno rival, en un partido en el que los dos puntos son tan importantes, tienes momentos de frustraci¨®n. Esto debi¨® de influir decisivamente en su actuaci¨®n. Pero yo estoy tranquilo y prefiero olvidarme de todo. Que sea la gente que vio lo que sucedi¨® la que juzgue.
P. ?Qu¨¦ conclusiones sac¨® del partido ante el Madrid?
R. Dimos una lecci¨®n al Madrid en todo. Adem¨¢s, las respectivas aficiones nos dieron una lecci¨®n de c¨®mo comportarse.
P. ?Supo perder el Madrid?
R. Me he enfrentado muchas veces al Madrid y cuando han ido por debajo no han sabido reaccionar bien. Tendr¨ªan que entender que las escaleras son para subir y para bajar, que nunca hay que despreciar al contrario, y saber que se puede tanto ganar como perder.
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